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Condenan por piratear a Cándido Bidó

El Tribunal ordenó el decomiso y destrucción de las producciones ilícitas pertenecientes al pintor Cándido Bidó

SANTO DOMINGO. El Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional condenó a tres meses de prisión y al pago de una multa de 100 salarios mínimos a dos personas acusadas de la distribución de obras artísticas conociendo su origen ilícito, en perjuicio del pintor Cándido Bidó.

Los jueces Antonio Sánchez Mejía, presidente en funciones del tribunal, Pilar Rufino Díaz y William Alberto Garabito, interino, declararon culpables a Eugenio Perdomo Batle y Henya Brayda Tejeda Montás de violar el artículo 169 numeral 2, literal f, de la Ley 65-00 sobre Derecho de Autor.

El Tribunal Colegiado ordenó que la sentencia sea ejecutada en la cárcel de Najayo, para lo cual dispuso comunicar una copia de la misma al juez de Ejecución de la Pena del Departamento Judicial de San Cristóbal.

Con relación al aspecto civil, Cándido Bidó, por conducto de su abogado apoderado especial José M. Alburquerque pidió una indemnización de RD$5 millones, pero los jueces que ventilaron el proceso impusieron el pago conjunto y solidario de RD$1 millón a favor del artista del pincel, como justa reparación de los daños y perjuicios causados. En su sometimiento, alega Bidó que los sentenciados falsificaron y comercializaron los cuadros denominados "Mujer con Rolos", "Niña con Sandía" y "Niñas con Hojas Rojas, que alegadamente vendieron por la suma de RD$180,000.

Dice que Tejeda Montás y Perdomo Batlle supuestamente pretendieron aprovechar el hecho de que adquirieron unos bocetos originales en papel de lija de la autoría del artista, de manos de los ex alumnos, entre los que figura Martín López, Benito Cuevas y Christian Tiburcio, para alegar que los cuadros que vendieron eran originales.

La querella contra los procesados fue presentada el 7 de enero del 2005 por ante la Fiscalía del Distrito Nacional, la cual afirma que la venta de obras de arte falsas provocó un daño por la saturación del mercado.