Orquesta Estudiantina de Cuba en una noche para recordar
La contraparte es la Super Orquesta San José que dirige Papa Molina. El precio de entrada p/p es RD$1200 VIP y RD$850, platea
Diario Libre
SANTO DOMINGO. Conocida como el patrimonio musical de Cuba, la reputada Orquesta Estudiantina Invasora se encuentra en suelo dominicano para actuar esta noche, a partir de las 9:00, en la serie de conciertos "Noche de Recuerdos" en el Teatro La Fiesta del hotel Jaragua.
Con más de 78 años en la escena musical, el conjunto, único en su tipo, es capaz de interpretar cualquier género, desde la contradanza, el danzón o la guaracha.
Estudiantina Invasora fue fundada por los mellizos Manuel y Luis Valera en 1927. Desde su creación ha ganado prestigio por la calidad de sus interpretaciones y la destreza de cada uno de sus integrantes.
El actual director de la Estudiantina Invasora, el conocido trompetista Inaudis Paisán, no estuvo entre los creadores, pero su sagacidad investigativa le ha hecho indagar en éstos y otros acontecimientos relacionados con la música popular cubana.
Dice, complaciente, que la estructura original estaba integrada por dos guitarras, dos tres, timbal, güiro, contrabajo y trompeta, verdaderamente variopinta; y en estos momentos, la diferencia es mínima: hace algún tiempo se han quedado con un solo tres.
La Estudiantina Invasora es el único grupo que sigue dando testimonio de la tradición de las orquestas de estudiantes que, hace un siglo, invadían las calles de Santiago de Cuba por el placer de tocar o por ganar algunos pesos. En Cuba, la tradición de las estudiantinas nació a finales del siglo XIX en la región oriental de la isla (provincias de Santiago de Cuba y de Guantánamo) cuna del son.
Con más de 78 años en la escena musical, el conjunto, único en su tipo, es capaz de interpretar cualquier género, desde la contradanza, el danzón o la guaracha.
Estudiantina Invasora fue fundada por los mellizos Manuel y Luis Valera en 1927. Desde su creación ha ganado prestigio por la calidad de sus interpretaciones y la destreza de cada uno de sus integrantes.
El actual director de la Estudiantina Invasora, el conocido trompetista Inaudis Paisán, no estuvo entre los creadores, pero su sagacidad investigativa le ha hecho indagar en éstos y otros acontecimientos relacionados con la música popular cubana.
Dice, complaciente, que la estructura original estaba integrada por dos guitarras, dos tres, timbal, güiro, contrabajo y trompeta, verdaderamente variopinta; y en estos momentos, la diferencia es mínima: hace algún tiempo se han quedado con un solo tres.
La Estudiantina Invasora es el único grupo que sigue dando testimonio de la tradición de las orquestas de estudiantes que, hace un siglo, invadían las calles de Santiago de Cuba por el placer de tocar o por ganar algunos pesos. En Cuba, la tradición de las estudiantinas nació a finales del siglo XIX en la región oriental de la isla (provincias de Santiago de Cuba y de Guantánamo) cuna del son.
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