Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Herramientas
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
revista

Raphael regresa "a lo grande" y deja una puerta "medio entornada" al cine

"Yo querría terminar mi vida cuando yo considere que he hecho todo lo que tenía que hacer, siempre en perfecto estado de salud y de fuerza"

Expandir imagen
Raphael regresa a lo grande y deja una puerta medio entornada al cine
Raphael

MADRID.- Después de su 50 aniversario en el mundo de la música, Raphael considera que sólo puede permitirse hacer "cosas grandes", por lo que vuelve con un triple CD homenaje a los "géneros más universales de América" y no descarta incluso un regreso al cine. "Dejo la puerta medio entornada", dice.

En una entrevista con EFE en Madrid con motivo de la presentación hoy de su nuevo disco, "Te llevo en el corazón", el cantante asegura que ésta ha sido la "producción más ambiciosa y costosa de su
carrera".

En estas situaciones de crisis, que según dice a él también le afecta, considera que "hay que trabajar el triple".

Será por ello que Raphael se ha calzado un traje a medida con tres discos en los que aborda separadamente el bolero, la ranchera y, por primera vez en su carrera, el tango, un género con el que ha disfrutado hasta el punto de recrear un dueto con el mismísimo Carlos Gardel en el clásico "Volver".

Esta revisión del tango es "de las mejores cosas que yo he podido hacer; he saldado una cuenta pendiente", dice.

Aborda este estilo con tanto ahínco que en la rueda de prensa posterior a la entrevista, se ha marcado un improvisado tango con una reportera de televisión. "No se me daba mal, pero ahora me he
preocupado de que se me dé mejor", cuenta ufano a EFE.

Cada género se ha grabado "a conciencia" en un punto del mundo y con la orquesta en vivo ("como cuando yo empecé a grabar", ha dicho). El tango en Buenos Aires, la ranchera en México y el bolero
en Madrid con músicos cubanos.

Él mismo se reconoce como un artista osado, que se ha atrevido con todo tipo de estilos y aventuras artísticas. "Lo importante es que mantenga la ilusión", dice.

Tanto es así que no descarta volver a hacer cine: "Como se están empeñando mucho, ya me lo estoy pensando. Dejemos la puerta, no abierta, pero medio entornada".

La culpa, según cuenta, la tendría Álex de la Iglesia, que en su última película, "Balada triste de trompeta", rinde un claro homenaje al artista utilizando el título de uno de sus temas.

"Es una barbaridad", dice en referencia al filme, que califica además de "tremendo". "Es una película que hay que ver, me alegro mucho de estar ahí y de estar con Álex", reflexiona.

La presencia de Raphael en pantalla está latente además tras la reciente emisión de una miniserie para televisión sobre su vida, que en su opinión "está muy bien hecha, con mucho cariño y mucho
respeto, muy bien interpretada, especialmente por Juan Ribó, al que le tocó el papel más difícil".

"No creo que a mí se me deba hacer una serie, esas cosas son para los que se han retirado o ya no están. Pero al leer el guión vi que era una oportunidad maravillosa para llamar a la donación de órganos
y está cumpliendo su cometido", señala el cantante, que en 2003 fue intervenido para un trasplante de hígado.

A Raphael no le gusta dormirse "en los laureles ni vivir del pasado". Reconoce que no termina un trabajo y ya piensa en el siguiente, en este caso, quizás en dos años, una producción con
canciones nuevas, "quizá más pequeña por el tipo de composición", adelanta.

De momento, tiene prevista una serie de conciertos con este álbum y sus clásicos de siempre durante tres semanas en el Teatro Compac Gran Vía de Madrid desde finales de noviembre. Además, presentará el disco en México y en Argentina; a finales de enero, comenzará una
gira por todo el mundo, de Nueva York a Moscú, y a partir de junio volverá a España, donde promete actuar en grandes espacios.

Esa energía que parece no tener fin desembocará algún día en unas "vacaciones largas, larguísimas", cuenta, pues rehúsa de pleno decir o pensar en la palabra "retiro".

"Yo querría terminar mi vida cuando yo considere que he hecho todo lo que tenía que hacer, siempre en perfecto estado de salud y de fuerza", dice. Eso sí, nada de morirse sobre el escenario, porque
esa es algo "antiestético".