Nueva York protege clínicas en zonas más afectadas por virus, muchas latinas

La ciudad de Nueva York va a reforzar con material y personal más de un millar de clínicas de salud comunitarias en los barrios más afectados por el coronavirus, muchos de ellos de mayoría hispana, según anunció este lunes el alcalde, Bill de Blasio.

Las clínicas recibirán a partir de ahora 120.000 mascarillas quirúrgicas y 115.000 guantes a la semana y, las que lo necesiten, podrán contar con profesionales de la reserva de sanitarios creada por la ciudad para responder a la emergencia del COVID-19.

El objetivo, explicó De Blasio, es en primer lugar que esos centros puedan apoyar la lucha contra el coronavirus y vuelvan a ofrecer con garantías la atención primaria que brindaban a los ciudadanos en comunidades más vulnerables y que se han visto especialmente golpeadas por la pandemia.

Además, se incluirá a las clínicas en las labores de pruebas del coronavirus y del rastreo de contactos de los infectados con la vista puesta en detener el avance de la enfermedad.

Los centros que se reforzarán con este plan están en 26 de los vecindarios más afectados por el COVID-19, muchos de ellos con gran población latina como East Harlem, Washington Heights e Inwood, en Manhattan; Corona y Elmhurst, en Queens; Sunset Park, en Brooklyn; y buena parte de El Bronx.

El alcalde explicó que se trata de que estas clínicas se sitúen a la cabeza de la batalla contra el virus y de que tengan también una mejor situación de cara al futuro para beneficio de las comunidades de bajos ingresos, inmigrantes y minorías, que son las que más están sufriendo con el coronavirus.

Según los últimos datos municipales, que difieren ligeramente de los que ofrece el estado, en la ciudad de Nueva York se han confirmado 14.753 muertes por COVID-19, con otras 5.178 atribuidas como probables a esta enfermedad.

Aunque las cifras no son completas, todas las estadísticas señalan que negros y latinos se están viendo afectados de forma desproporcionada.

Según datos de la ciudad, entre la población negra han muerto por coronavirus más de 243 personas por cada 100.000 y entre los hispanos 238 por cada 100.000, mientras que en el caso de los blancos ese número baja hasta 121,5 y entre los asiáticos a 109.

EFE

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