"[REC]4 Apocalipsis", la explicación de la pesadilla zombie

Concluye la saga de REC, la terrorífica historia, en cuatro entregas, en la que sus protagonistas se han enfrentado a un misterio sin resolver, el origen de una extraña infección que convierte a la gente en zombies. Esta cuarta entrega desvelará el secreto final, cambiando el escenario terrestre por un panorama marítimo.

Hola y adiós a "REC", la exitosa saga de películas de terror para gente con un estómago más que resistente y con alta tolerancia a las situaciones claustrofóbicas. Este otoño llega a los cines su cuarta y última entrega.

Con ella, el director de películas como "Mientras duermes", "Los sin nombre" o "Darkness" hace volver a esos zombies que han hecho saltar en sus asientos a miles de personas con sus apariciones y ataques repentinos, así como a Ángela Vidal, la que fuera protagonista y única superviviente del edificio con infectados de Barcelona de la primera película, "(REC)1".

El 31 de octubre será la fecha en la que sus seguidores podrán disfrutarla en los cines. Sin embargo, los que no puedan esperar, podrán verla en el Festival Internacional de Cine de Toronto, del 4 al 14 de septiembre, o el 3 de octubre, en el estreno del Festival Internacional de Cine de Sitges (España).

La novedad

"(REC)4 Apocalipsis" retoma la acción donde la dejó la segunda entrega, "(REC)2", pero traslada la historia a un barco, lugar en el que, en palabras de su productora, Filmax, "el caso vuelve a desatarse y la semilla del mal renace adoptando nuevas y terribles formas".

Ángela Vidal (Manuela Velasco), reportera y única superviviente del inmueble infectado, ha sido rescatada y llevada por unos militares a un buque perdido en el océano. Como no podía ser de otra forma en esta narración, la extraña infección se expande entre la tripulación del navío sin haber escapatoria posible.

Velasco, así como Paco Manzanedo, Héctor Colomé y Críspulo Cabezas, entre otros, están bajo la dirección de Jaume Balagueró, que en esta película se las apaña sin problemas en solitario, con la colaboración de Manu Díez como coguionista, para lograr un marco de terror digno de la saga a la que pertenece esta producción de Julio Fernández al son de la música de Arnau Bataller.

El nombre de Paco Plaza, que compartió dirección con Balagueró durante las dos primeras partes de la historia y dirigió en solitario la tercera, no ha desaparecido del todo en la película, ya que colabora como productor creativo.

Contexto 

Continúa así la historia que comenzaron ambos directores en 2007, convertida en la primera franquicia de cine de terror creada en España. 

La historia de un virus, mezclado con supuestas posesiones demoníacas que introducen con el personaje de la niña Medeiros, ha conseguido que miles de personas se enganchen más que nunca a la cuarta entrega. Más que nada, porque será la manera de descubrir de dónde surge este cuento para no dormir, ya que, como ha afirmado Plaza, en esta película se hallará la explicación de las dudas del público.

Zombies que muerden para infectar, pero que se detienen en su ataque al escuchar oraciones católicas, así como que sus reflejos en los espejos no se correspondan, no hacen más que generar todo tipo de expectativas sobre qué va a ocurrir en el último filme de "REC".

Nada que ver con lo que consiguió John Erick Dowdle, director de "Quarantine", un "remake" americano de esta idea española que apenas pudo despegar dada la poca imaginación que le puso al proyecto: misma línea argumental, mismos personajes, mismo orden en las muertes.

Detalles técnicos

Siete han sido las semanas que se han necesitado para rodar esta película de Balagueró, además de contar con la participación de TVE y Canal+, entre otras, y la colaboración de Televisió de Catalunya.

Los lugares de rodaje se han dividido entre un barco de origen ruso en Las Palmas de Gran Canaria y un parque audiovisual en Terrassa (Barcelona), en cuyo plató se ha construido una réplica de una zona del buque para grabar ciertas escenas.

Balagueró ha hablado de la complicación que ha supuesto filmar esta película, "porque es un decorado que está muy bien a nivel visual, pero meter a un equipo de 50, 60 o 70 personas dentro de un barco enorme, un pesquero industrial con fábrica de pescado no es cómodo". Sin embargo, ha afirmado que la experiencia "ha sido apasionante".

Que se olviden los fans del recurso de la cámara subjetiva (o cámara en mano), ya que Jaume Balagueró ha aprovechado el cambio de formato que se vio en "(REC)3". Por otra parte, el director ha asegurado que este largometraje de 95 minutos será "tan terrorífico como el primero" e "igualmente claustrofóbico".

Según afirma Manuela Velasco sobre cómo va a afectar al público, va a dar "muchísimo más miedo porque el lugar que se ha elegido para la cuarentena es un barco lleno de gente y cuando se propaga la infección son muchísimas personas más las infectadas", sin olvidar que es un lugar en el que no hay escapatoria posible. 

Diario Libre