Dee Gordon y la apuesta del dopaje

SD. Dee Gordon asegura no saber cómo entraron a su cuerpo la testosterona exógena y el clostebol que le han costado 80 partidos de suspensión. Un supuesto amigo del intermedista de los Marlins asegura al USA Today que a éste le sobraban razones para doparse.

Gordon dejará de cobrar US$1.6 millones por ausentarse la mitad de la temporada, una fracción del contrato que logró en enero al explotar en 2015 tras ser descartado por la organización que lo firmó y formó.

“¿Por qué Dee no tomaría la oporunidad, por qué alguien no lo haría?”, preguntó el supuesto amigo. “Lo atraparon. ¿Y qué? Fue mejor que pasarse su carrera en las menores. Su imagen puede ser golpeada, pero todavía tiene US$50 millones en el banco y puede mantener a su familia por el resto de su vida. Cuando lo piensa, vale la pena”.

Es el gran dilema que enfrenta tanto las Grandes Ligas como los deportes profesionales repletos de talentos compitiendo por pocas plazas y donde un buen desempeño puede acelerar un acuerdo que resuelva el tema económico para varias generaciones.

Van 11 jugadores suspendidos esta campaña, incluyendo Chris Colabello la semana pasada y el dominicano Abraham Almonte en los entrenamientos.

Gordon, de 28 años, es considerado como una de las personas más agradables del juego a pesar de la dura niñez que tuvo en la Florida con su abuela tras su madre ser asesinada por un ex novio cuando él tenía seis años.

Agregar fibra a sus 170 libras en los 5’11 pies que mide ha sido tarea imposible. Si bien debutó en 2011 con los Dodgers no fue sino hasta 2014 cuando encontró espacios tras jugar con el Licey en 2013-2014.

Los Esquivadores consideraron que no pasaría de ser un jugador sustituto (en términos económicos de ganar el mínimo) lo enviaron a los Marlins y hasta pagaron parte de su salario para 2015, año en el que se convirtió en el primer jugador en ganar los títulos de bateo (.333), robos (58) y hits (205) en la Liga Nacional desde Jackie Robinson en 1949.

Es probable que si no se hubiese dopado en 2015 nunca hubiese ganado los US$1.6 millones que dejará de ganar este año. Tampoco haber conseguido un pacto de US$50 millones.

NPerez@diariolibre.com

Nathanael Pérez Neró