Banesco llega a España

En 2011 Banesco abría su primera oficina en República Dominicana. Un banco venezolano que seguía el dinero venezolano allá donde fuera, decían algunos. Ahora el salto ha sido más ambicioso. Bajo la marca Abanca, Banesco ha saltado el charco. Su etapa española empieza por Galicia.

Santiago de Compostela. España. Comencemos hablando de dinero ya que hablamos de bancos. El grupo Banesco que fundó en 1986 y lidera Juan Carlos Escotet habrá pagado 1,003 millones de euros en un plazo de tres años por NovaGalicia, el banco que ha comprado en subasta en España.

El pie de amigo para desembarcar en Galicia, región del noroeste de España ha sido una institución tradicional y pequeña, Banca Etcheverría , adquirido por Banesco en 2012. Un pequeño banco nacido en 1717 y que opera principalmente en Galicia con alguna oficina en otras regiones españolas.

Pero el objetivo de Escotet era más ambicioso. Descendiente de españoles, llegaba con ganas a un mercado muy tocado. La crisis de las cajas de ahorros, algunas intervenidas (otras desahuciadas) ha abierto la puerta a diferentes tipos de inversionistas. Esa sido la gran oportunidad de este banquero venezolano. Oportunidad que también han visto también otros compatriotas (Tomás Niembro e Isaac Sultán) con el mismo objetivo de hacer banca minoritaria.

No son los únicos: capital mexicano entró el mes pasado en Liberbank (antigua Cajastur), la familia del Valle entró en el Popular y el fondo Fintech, dirigido por David Martínez, también mexicano, compró el 5% del Banco Sabadell.

Para España, una vez más aunque de otra manera, América es parte de la solución.

Banesco y Banca Etcheverría, que completarán su fusión en el último trimestre de 2014, deciden pujar en la subasta de la venta de NovaGalicia Banco, una entidad nacida de la fusión de dos cajas de ahorros en graves problemas: Caixa Galicia y Caixanova. El miércoles 25 de junio el órgano regulador firmaba la aprobación y los nuevos propietarios se alistaban a presentar a la sociedad gallega primero, y a todo el sector financiero español la nueva entidad.

Esta sopa de siglas y marcas bancarias desaparece finalmente para dar paso a un un nuevo nombre: Abanca. Con fuertes connotaciones localistas ("a banca" en gallego significa "la banca" y por "a banca", sin necesidad de apellidos, se conocía a la Caixa Gallega) la nueva marca se propone apelar al "sentir común" de los gallegos, a la cercanía, a la solución a necesidades locales y personales, al acompañamiento en el espíritu emprendedor gallego que siempre ha sabido encontrar y aprovechar oportunidades en el mundo. Aunque lo haga "mejor fuera que en casa" resalta Javier Etcheverría presidente de Abanca, un joven de 82 años. Y añade, "para eso ha nacido Abanca, para desarrollar ese espíritu emprendedor aquí en Galicia que tantos frutos ha dado a los gallegos fuera de su tierra".

"Un banco con alma de caja", "Somos los mismos pero mejores", se dice en su campaña de presentación. El reto, conseguir fundir en la personalidad de ABANCA el espíritu renovador que infunde siempre América y el respeto a las tradiciones y a la tierra de las cajas de ahorros gallegas.

Como señas de identidad de Banesco que se trasfunden a Abanca, sus ejecutivos resumen: la cultura de comunicación corporativa, tanto interna como externa. (Banesco dialoga, dice su presidente). Su convicción de que la banca debe dedicarse a eso, a la banca y no a otros asuntos. Su decidida apuesta por las nuevas tecnologías (Escotet es un tuitero activo). Su apuesta por la banca minoritaria practicada a través de un esmerado servicio. Su identificación con las pymes como generadoras de empleo y articulación social, Así se entienden y así han presentado el nuevo banco.

Entusiasmo, escepticismo

En la presentación de Abanca, en Santiago de Compostela, el presidente gallego Alberto Núñez Feijó (Partido Popular) habló del "entusiasmo" y del "escepticismo" que él detecta en la sociedad gallega ante el nuevo banco.

¿Contradictorio? No, probablemente cauto, como buen gallego. Hay que entender que la crisis de las cajas de ahorros, instituciones muy arraigadas en la vida diaria de la sociedad en la que operaban ha sido un proceso traumático de cierres, despidos, fracasos... En tres años, los ahorrantes de la Caixa han visto cambiar las siglas de su banco cuatro veces. De no haberse concretado la compra, por Banesco o por otro banco, el rescate de Novagalicia Banco habría costado más de 10,000 millones de euros al erario público español, calculan los analistas.

Y el "entusiasmo" se explica también fácilmente. Entre las tres posibilidades sobre la mesa, la oferta de Banesco era la que garantizaba que la sede social de la nueva entidad quedara en Galicia, respetaba el número de sucursales y empleos existentes al momento de la compra y se garantizaba un esquema de banca minoritaria y de flujo de crédito que repercutirá directa y rápidamente en la vida de los gallegos. Uno de sus primeros productos, préstamos de hasta 50,000 euros en 48 horas. El compromiso de destinar el 3% de los beneficios a partir de 2017 y de invertir al menos 15 millones de euros en Galicia en los tres primeros años de operación también ayudan.

¿Por qué no Banesco?

Había razones de peso para crear una nueva marca. En el mercado español, Banesco suena demasiado parecido a Banesto, una entidad ya desaparecida "pero no había que arriesgarse a confusiones incómodas", explica Francisco Botas, consejero delegado de Abanca. Además, añade, "el vínculo con la sociedad gallega es demasiado fuerte, no podía ignorarse esa realidad: siete de cada diez son nuestros clientes ". Banesco como marca americana, Abanca como marca española y europea. Excelente sinergia, resume.

Banesco Grupo Financiero Internacional es tras el nacimiento de Abanca un grupo multinacional con actividad propia en 14 países, activos por US$115.540 millones, 1,210 puntos de atención al público, una cartera de créditos por US$57,034 millones, depósitos por US$81,961 millones y más de 7 millones de clientes en 14 países.

En República Dominicana, con sus 14 sucursales, dará apoyo logístico y representación a la filial española. Para Juan Carlos Escotet, vicepresidente de Abanca, la oportunidad de ser puente para las inversiones entre Latinoamérica y Europa es un "reto apasionante" y servir a las comunidades de españoles residentes en el exterior, uno de sus objetivos. En números redondos, alrededor de 50,000 españoles residen en República Dominicana y 130,000 dominicanos lo hacen en España. Una interesante cifra sobre la que empezar a trabajar. A la fecha, 30,000 dominicanos son ya clientes de Banesco. Sus 340 empleados forman parte de un grupo que da trabajo a más de 19,000 personas en 14 países y localmente su cartera de crédito ya alcanza los 155 millones de dólares.

Empezábamos hablando de precio, terminemos tocando el tema de los sueldos. Los consejeros de Abanco tendrán un sueldo de 500,000 euros al año, más 100,000 en concepto de dietas. Y de cifras. Las que trabaja Abanca, incluido el crecimiento de más del 2% para España en 2015 explican por qué Banesco cree que es el momento de invertir en España. Se siente ya que la crisis empieza a ceder, contagian optimismo.

Inés Aizpún