Mariluz Acosta

Muchos han dicho que este es el año del teatro, empezando porque le dieron el más alto galardón en los pasados Premios Soberano al actor Iván García.

Lo primero es que el hecho de que premien a un actor de teatro no quiere decir que es el año del teatro, porque los premios son una cosa y el trabajo continuo, el quehacer del teatro, es otra. Para mí siempre ha sido el tiempo del teatro. Sin embargo, se necesita hacer más. Siempre debería haber teatro en todas las salas del país. Creo que ahora es más tiempo de cine que de teatro.

¿Por qué será?

Porque la Ley de Cine le ha dado una fuerza a los productores, un empuje a las realizaciones cinematográficas en el país, lo cual no tenemos en el teatro.

Ganó el segundo lugar en el renglón de Cortos en el Festival de Cine de Fine Arts. ¿Pensó al hacerlo que podría ganar algún premio con él?

Soy una persona que nunca en su vida ha pensado en premios. Soy una artista innata. Trabajo para expresarme, para contar historias. Para contar lo que veo en otros y lo que otros quisieran expresar y no pueden. Normalmente, los cortometrajes los haces pensando en mandarlos a los festivales. Pero no necesariamente para que ganen premios, si no para que se vean.

¿El teatro es una forma de hacer activismo social?

No me gusta que me llamen activista, pero tengo que aceptar que sí lo es. Es un activismo cultural. Activista y políticos, casi todos los artistas lo somos. Soy política más no partidista. Porque el arte en sí es política por el carácter de denuncia que lleva. Los temas de la mujer y de la inmigración son muy importantes para mí, porque soy inmigrante y soy mujer.

La obra que más le ha tocado...

Mujeres al desnudo. No es que me ha tocado a mí, es que me ha tocado el ver cómo ha tocado a otros. Hubo un hombre que, a través de ella, se dio cuenta de que abusaba de su esposa.

Cuando no está en teatro...

Me encanta la ópera, el jazz, cenar fuera, ir al museo. Tengo dos hijos [una hembra y un varón]. Cuando se es madre y artista, el truco es involucrarlos; darles calidad de tiempo. Desde que estaban pequeños los involucraba en mi trabajo. La familia es un equipo y si no se trabaja para el beneficio de todos es una empresa que va cayendo.

Foto: Bayoan Freites.

Nazaret Espinal