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Talento y juventud: el binomio cuasi perfecto

El Programa Jóvenes Talentos que realiza el Banco del Progreso surge como una solución para aquellos egresados que buscan ganar experiencia en su área y, de paso, darles la oportunidad de tener un empleo.

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Talento y juventud: el binomio cuasi perfecto

Sin hacer distinción de carreras profesionales, insertarse en el mercado laboral se convierte cada vez más en una lucha titánica. Y es un problema que alcanza escalas mundiales. La buena noticia es que aparecen los oasis en medio del desierto. El Programa Jóvenes Talentos que realiza el Banco del Progreso surge como una solución para aquellos egresados que buscan ganar experiencia en su área y, de paso, darles la oportunidad de tener un empleo.

Fueron insistentes y por eso, iniciamos por aclararlo: no se trata de una pasantía. Entra dentro de la denominación de programa porque simplemente tiene una metodología de Recursos Humanos que lo soporta, que denominan 70-20-10. Eso se traduce de la siguiente manera: 70% de experiencia de campo, 20% de formación académica y un 10% de acompañamiento, mentoría o coaching.

Esta es la estructura del Programa Jóvenes Talentos que se desarrolla desde hace poco más de cuatro años dentro del Banco del Progreso. Nace con el propósito de crear formación gerencial acelerada con vistas a tener personal identificado y preparado dentro de la cultura de esta entidad financiera. Así lo explica Yolanda Hernández, vicepresidenta de Recursos Humanos.

La idea es que, cuando llegue el momento de la transición, haya disponible un relevo con el perfil que cumpla con los requerimientos para suplir las necesidades puntuales que en ese momento demande el banco. Por eso, se enfocan en capacitarlos, permitiéndoles interactuar en las diferentes áreas por medio de rotaciones y además “confirmen sus intereses de carrera”, destaca Hernández.

Carolina Paulino, gerente de Selección y Reclutamiento, de su lado nos explica, que la idea es que estos jóvenes tengan trabajo una vez concluyan el programa. Ahora bien, mientras los tres años pasan, ellos tienen todos los beneficios de un empleado “y hasta más, porque no todos tenemos la oportunidad de tener un plan de carrera diseñado”, destaca Paulino, e insiste en destacar que no se trata de ‘algo’ temporal. Cuando terminan el programa deben estar listos para ocupar un puesto gerencial. Esa es la meta.

Ahora bien, una vez estos jóvenes determinan lo que ellos llaman “su ruta de desarrollo”, están listos, no solo para desempeñarse como líderes, supervisando equipos de trabajo dentro del Progreso, sino que también tienen la capacidad de emprender sus propios negocios personales. “Es natural que algunos de ellos cambien sus intereses de carrera y persigan otros objetivos profesionales”, reconoce Paulino.

Sí. Son conscientes de que no todos se quedan. Ante esta situación, no son pesimistas porque a fin de cuentas, su meta es formar líderes. Carolina Paulino nos mencionó, durante su visita a Diario Libre, de algunos casos de emprendimiento en los que algunos han iniciado su propio negocio y otros han sido sucesores de negocios familiares.

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Infografía
Los j[ovenes deben destacar por el liderazgo, análisis y solución de problemas, trabajo en equipo, toma de decisiones, iniciativas, inteligencia emocional y proactividad. (SHUTTERSTOCK)

Cuál es el perfil?

La VP de Recursos Humanos, Yolanda Hernández, destaca que los seleccionados para formar parte del Programa Jóvenes Talentos deben cumplir con una serie de requisitos, tanto académicos como personales.

En primer lugar, deben ser egresados de maestrías tanto del país como fuera de él. Para captarlos tienen convenios con diferentes universidades y con el Ministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología (MESCYT): “A través de esos contactos tenemos acceso a un al lista de egresados de programas de maestrías, locales e internacionales, a los cuales hacemos un llamado directo”, nos cuenta Hernández.

Dichos egresados deben ser de los dos últimos años que están en curso. Por ejemplo, la convocatoria de este año está reclutando perfiles entre 2014 y 2015.

Carolina Paulino nos relata que desde el primer paso, que es la llamada telefónica, ‘limpian el perfil’, es decir que agotan con ellos una serie de preguntas sobre sus áreas de intereses, formación académica, hasta cuál fue su asignatura favorita. Luego los convocan para hacerles una entrevista presencial basada en las competencias. Aquí es donde entra en juego Yolanda Hernández. Sigue una evaluación grupal en la que pretenden medir esas competencias. Al final, se entrevistan con el presidente ejecutivo de esta entidad financiera, Mark Silverman, y otros miembros de la gerencia.

Son muy específicos sobre las competencias visibles y/o potenciales, a destacar: el liderazgo, análisis y solución de problemas, trabajo en equipo, toma de decisiones, iniciativas, inteligencia emocional y proactividad. Además, deben tener dominio del idioma inglés y claro está, mostrar interés en desarrollarse como profesionales dentro del sector bancario.

Testimonio

A la fecha, han tenido 63 participantes. Veintinueve de ellos están activos. Durante la entrevista, tuvimos la oportunidad de conocer a cinco de ellos, quienes confirmaron lo mucho que ha significado formar parte de este programa, destacando particularmente la parte de asesoramiento o coaching. Karl Max, quien se encuentra agotando ya el tercer año del Programa, testimonia sobre el valor al soporte que le brindan: “trabajan de cerca con capacitación medida y planificada para nosotros. El personal tipo coaching nos ayuda a medir nuestras habilidades y a cómo irlas desarrollando”. Karl, de 28 años, llegó un domingo de su maestría, y ya el lunes siguiente, Carolina Paulino lo estaba llamando. Dice que habían conseguido su contacto a través de la Mescyt.

Otros se enteran de este proyecto por lo que se conoce como “boca a boca”. Los que ya han participado cuentan su experiencia a otros y los motivan a animarse. Sin duda, es una experiencia que vale la pena.

Las caras del Programa Jóvenes Talentos

Karl Max Corporán

Graduado de Ingeniero Industrial en INTEC.

Maestría en Ingeniería Industrial – Rochester Institute of Technology.

Miriam Badía

Graduada de Administración de Empresas en la PUCMM.

Maestría en Desarrollo de los Recursos Humanos - Rochester Institute of Technology.

Selma Moncada

Graduada de Mercadeo en la PUCMM.

Maestría en Marketing Estratégico en London School of Business and Finance.

Daniel Encarnación

Graduado de Ingeniería Industrial en la PUCMM

Maestría en Servicio

– Rochester Institute of Technology

Lissellot Marte

Graduada de Administración de Empresas de INTEC.

Maestría en Banca y Asesoría Financiera en el CEF (Centro de Estudios Financieros).

Foto principal: Bayoan Freites

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