El peso a la par

Cuando el peso dominicano valía más que ahora se decía, a modo de chanza, que pronto estaría a la par con el dólar. Había en ese entonces que dar algo menos de un peso y medio para comprar un dólar, y se temía que en poco tiempo hubiera que pagar un par de pesos por cada dólar.

Hoy el peso está prácticamente a la par, realmente, no en broma, pero no con el dólar sino con el rublo ruso. Ayer al mediodía un dólar valía 46.1 rublos en el mercado internacional y algo más de 44 pesos dominicanos, lo que implicaba una virtual equivalencia entre nuestra moneda y la rusa.

La devaluación en Rusia ha sido más acelerada, sin embargo, pues mientras en el 2010 un dólar valía unos 36 pesos, en ese mismo año sólo valía cerca de 30 rublos.

Pero hay una diferencia, que puede hacer que la paridad del peso con el rublo sea efímera. Esa diferencia consiste en que nuestra devaluación ha sido gradual, estable y sostenida en el tiempo, y no anticipamos razón alguna por la que pueda revertirse. El descenso del rublo, por el contrario se aceleró este año por las sanciones impuestas a Rusia por los Estados Unidos y la Unión Europea, las cuales provocaron importantes salidas de capitales financieros y fueron agravadas por el descenso en el precio del petróleo.

El gobierno ruso intentó atajar la caída del rublo, a fin de cumplir su objetivo de mantener su valor dentro de la banda de variación prevista. Drenó sus reservas de dólares y euros en alrededor de US$31 mil millones, pero no pudo impedir que el rublo se depreciara en un 25% frente al dólar en los últimos dos meses. Finalmente, el lunes de esta semana, el gobierno decidió que no podía seguir sosteniéndolo y lo dejó “flotar”.

Una vez levantadas las sanciones, el rublo podrá retornar a su nivel normal y ya no podríamos decir entonces que nuestro peso está a la par con él. Pero si no con el rublo, quizás con otra moneda. Ayer estaba casi a la par con el peso filipino.

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Gustavo Volmar