Perseguir a los violadores de la Ley de Tránsito a veces termina en tragedia

SANTO DOMINGO. Las persecuciones de los agentes de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET) a los infractores de las leyes de tránsito -en especial a los conductores de motocicletas- suelen poner en riesgo la vida e integridad física tanto de los agentes, de las personas que huyen, como de otras que transitan por las calles, ya que se realizan a alta velocidad y sin tener las precauciones debidas al conducir, debido a que el objetivo es solo: atrapar y escapar.

Este sábado, el vicepresidente de la Federación Dominicana de Motoconchistas (FEDOMOTO), Tomás Valdés, mientras trataba de evadir a un miembro de la AMET aceleró su motocicleta y fue embestido por una jeepeta en la intersección de las calles Norberto Batista y Francisco Prats Ramírez, en el sector Los Restauradores, y luego chocó con una pared, lo quele provocó la muerte.

Testigos del hecho dicen que el agente, que también iba a alta velocidad, no se detuvo.

Sobre el caso, el vocero de la institución, Roberto Lebrón, declaró que siguieron a Valdés porque andaba sin casco protector y a alta velocidad.

Otro caso lamentable que involucra a miembros de la Amet sucedió el martes 29 de abril, a las 2:33 de la tarde, en el Ensanche Quisqueya.

La colisión de dos motoristas, uno que lo perseguía un agente y otro que transitaba por el lugar, fue captado por las cámaras de seguridad de una compaventa de la zona.

Los afectados, que salvaron su vida milagrosamente, sufrieron lesiones severas. Uno de ellos perdió la mayoría de sus dientes según el dueño del negocio, quien confirmó lo que se ve en las imágenes: el agente se va tras el accidente.  

"Los AMET son policías y si yo soy policía, por ejemplo, y alguien emprende la huida, ¿qué hace el policía? Le persigue", expresa Lebrón, quien lamentó el fallecimiento de Tomás Valdés.

Daniel de los Santos, presidente de FEDOMOTO, declaró que los agentes de la AMET tienen una "persecución continua" contra los motociclistas y defendió que éstos traten de escapar de la autoridas, alegando que les retienen los motores, que son su medio de sustento.

Según el acápite G del artículo 28 de la Ley 241-67 de Tránsito , los agentes sólo pueden incautar los vehículos cuando éstos no estén autorizados para circular; tengan el número de placa de otro vehículo de motor; tengan el número de identificación o chasis borrado, alterado o tapado; o exhiban placas no prescritas por la ley. En su artículo 135, la Ley establece que las personas que conducen motocicletas están obligadas a llevar un casco protector.

Roberto Lebrón afirma que por lo regular quien trata de evadir la fiscalización de la AMET "es porque tiene una anomalía en sus documentos" y expresó que, por la seguridad de los motoristas, también retienen sus vehículos si no andan con los casc0s protectores, hasta que estos conductores se presenten con la referida protección.

"Por lo regular para garantizarle la seguridad al motorista si no lleva casco se le retiene; cuando va con su casco se le entrega", dijo a Diario Libre.

Lebrón recomendó a los motoristas que usen el casco protector y tengan los documentos en regla.

"Nosotros en la AMET somos protectores de los ciudadanos (...) No le huyan a la AMET porque AMET no es un monstruo. AMET está integrado por hombres y mujeres igual que ellos", sostuvo.

Tomás Valdés vivía en el sector Los Ríos y, según cuenta Daniel de los Santos, iba a visitar a su madre. La huida le cobró con la vida y nunca pudo llegar a saludarla.

Diario Libre