Crisis de agua afecta varios sectores de La Romana

LA ROMANA. Residentes de sectores de esta ciudad reclamaron a la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de La Romana (COAAROM) poner punto final a la precariedad en el servicio de agua, situación que se ha agravado en los últimos meses.

Las familias afectadas con la precariedad están domiciliadas en Río Salao, Bancola, La Aviación, El Hoyo, Savica, Avenida Libertad, Melissa, Benjamín, centro de la ciudad y una parte de Villa Pereyra.

Mildred Ortiz, de La Aviación, dijo a Diario Libre que las familias de limitados recursos económicos gastan dinero del presupuesto familiar en la compra de agua a los camiones que comercializan con el preciado líquido.

“En mi casa se gasta más de 500 pesos semanales en la compra de agua”, señaló Ortiz, residente en la calle Héctor René Gil, del referido sector.

De su lado, Oneida del Rosario, se quejó en el sentido de que el suministro resulta ser tan precario que sólo llega “un chorro”, a veces una vez al día.

“Casi todo el mundo tiene que comprar una bomba para alar el agua, pero imagina cuando no hay energía eléctrica”, añadió Del Rosario.

La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de La Romana (Coaarom) admitió que la precariedad en el suministro se acentúa durante la molienda de caña para la producción de azúcar por el Central Romana, basándose en que esa empresa opera el acueducto de María Bonita.

“En época de zafra en el ingenio azucarero se incrementa el uso del agua potable en la zona industrial, ocasionando una disminución en la presión del líquido en los sectores de La Romana”, dijo Andy Omar Johnson, asistente del director ejecutivo, Manuel de Jesús Cedeño.

Sin embargo, Johnson aseguró que desde hace unos meses los ejecutivos de la compañía y funcionarios de la COAAROM están buscando soluciones para que en un futuro se pueda ofrecer un servicio más eficiente.

Sectores de la parte alta de la ciudad, como Villa Verde, San Carlos y Villa San Carlos, no disfrutan de un servicio continuo, pero pueden abrir sus grifos a determinadas horas y el agua llega con cierta abundancia.

Esto sucede porque dichos barrios tienen otras fuentes que no es el acueducto de María Bonita, tales como pozos tubulares habilitados en diversos puntos de la provincia.

Franklin Cordero