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No se olvidan cicatrices del huracán "Georges"

Los planes de emergencia no fueron activados durante la amenaza del ciclón y las medidas preventivas no fueron adoptadas a tiempo

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No se olvidan cicatrices del huracán Georges
Las pérdidas se cifraron en RD$18 mil millones.
Santo Domingo. El 22 de septiembre de 1998 muchos en República Dominicana sintieron que había amanecido más temprano. La falta de sueño por la inquietud y la incertidumbre hizo presa de los dominicanos ante el paso de "Georges", un huracán que a partir de las 6:00 de la mañana de ese día inició su paso fatídico sobre el país con vientos de 200 kilómetros por hora, lluvias intensas y fuertes rompientes del mar.

Todavía se discute la actuación de las autoridades en la prevención de los daños ocasionados por el fenómeno que pasó lentamente sobre la capital.

Las fuertes lluvias registradas sobre la Cordillera Central, sobre todo en las provincias de Azua y San Juan de la Maguana, provocó el desbordamiento de ríos y represas, en torrentes de agua que se llevaron consigo viviendas, puentes y carreteras, y causaron serios perjuicios al sistema eléctrico y a las redes de agua potable.

Se reportaron unos 280 muertos, mientras más de 60 mil viviendas fueron afectadas, fundamentalmente en las regiones este, sureste, suroeste del país y en el Distrito Nacional.

Cálculos conservadores cifraron en más de RD$18 mil millones el costo de los daños ocasionados por Georges a la economía dominicana. Casi un 90% de la producción de plátano perdida, plantaciones arroceras enteras convertidas en puro fango, fueron algunos de los efectos.

Otro día aciago

Otro 22 de septiembre, pero hace apenas tres años atrás, la naturaleza volvió a sacudir a República Dominicana, esta vez con un temblor de tierra que dejó graves daños en la zona del Cibao, especialmente en Santiago y Puerto Plata.

Muchos de los edificios afectados eran escuelas públicas, por lo que casi 20 mil estudiantes quedaron fuera de las aulas.