Combustibles
Un reciente seminario ha puesto en evidencia la limitada capacidad de almacenamiento de combustibles de que dispone la República Dominicana. Bastaría cualquier evento en los países exportadores, para que nuestro país se quede sin combustibles en un lapso tan breve como una semana.
No sólo se trata de la limitada capacidad de almacenamiento, sino también de que todos los depósitos se encuentran en la costa sureste de la isla, la zona más afectada tradicionalmente por desastres naturales. Es decir, estamos frente a dos aspectos que conspiran contra la seguridad energética de los dominicanos.
Urge, por tanto buscar salidas al problema. Ahí tiene el sector privado una oportunidad de oro para contribuir al desarrollo nacional en un mercado competitivo. Diversificar la ubicación de los depósitos podría eventualmente contribuir, no sólo a bajar los costos, sino también a elevar los niveles de competencia en el mercado de los combustibles.
He ahí otra magnífica oportunidad de colaboración entre el sector público y el privado en beneficio de la nación dominicana.
No sólo se trata de la limitada capacidad de almacenamiento, sino también de que todos los depósitos se encuentran en la costa sureste de la isla, la zona más afectada tradicionalmente por desastres naturales. Es decir, estamos frente a dos aspectos que conspiran contra la seguridad energética de los dominicanos.
Urge, por tanto buscar salidas al problema. Ahí tiene el sector privado una oportunidad de oro para contribuir al desarrollo nacional en un mercado competitivo. Diversificar la ubicación de los depósitos podría eventualmente contribuir, no sólo a bajar los costos, sino también a elevar los niveles de competencia en el mercado de los combustibles.
He ahí otra magnífica oportunidad de colaboración entre el sector público y el privado en beneficio de la nación dominicana.