Faltó previsión con la sequía...

La sequía se le pega ahora al Niño, pero igual a La Niña, o a la Santa María o a La Pinta, las embarcaciones del Almirante, pues la falta de agua en determinada época del año es un fenómeno viejo.

Lo sabe el campesino por experiencia, y con más razón los organismos responsables del área, pues disponen de equipos y medios para írsele alante al problema.

Puede decirse, por tanto, que los funcionarios que tienen que ver con agua fueron sorprendidos asando batatas. Hubo que decirles que cerraran el potrero después que se habían escapado las vacas.

Ellos no debieron esperar que el Presidente les pidiera un plan de contingencia, sino que este debió estar listo desde el momento en que fueron evidentes los síntomas de sequía aguda.

Incluso, desde mucho antes, ya que era previsible desde el anuncio de la temporada ciclónica de que las lluvias no serían abundantes durante el 2015.

Claro, se defenderán alegando falta de fondos, pues nadie querrá cargar con culpas. Sin embargo, hasta por esa misma razón debieron ser más precavidos.

Los recursos fuera de Presupuesto aparecen, pero después de un quita y pon que nunca resulta conveniente.

Diario Libre