Faride tiene que pensarlo mejor...

Faride tiene que pensárselo bien, pero muy bien, pues no siempre santa María estará detrás de la puerta. Al primer intento de subir, le tumbaron la escalera.

Creyó que con decir “yo primero” como representante de oposición en el Consejo de la Magistratura, vía Cámara de Diputados, la posición sería suya. Pues fíjese que no.

La compañera Josefa no expresó públicamente su aspiración, y tampoco hizo nada para ser nominada. Dicen que sí pensó en ser vocera del bloque.

¿Por qué Josefa y no Faride? Podría atribuirse la selección a cosas de mujeres. De mujer a mujer, como la canción. Sin embargo, ese no fue el caso ahora. Los votantes sí, el PRM no.

Fue un designio de hombres, y de hombres que consideran a la mujer políticamente subordinada.

Cuando le preguntó a su émula el porqué de la decisión. La respuesta fue un poema de honestidad: “el partido no confía en ti”.

Faride, hay que repetirlo, tiene que pensárselo bien, pues fue la más votada en su circunscripción, y ahora resulta que su partido no confía en ella.

Diario Libre