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Las huellas de García Lorca se siguen en Nueva York en su 114 aniversario

"Nueva York estremeció a García Lorca, dejó en él un impacto muy grande"

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Las huellas de García Lorca se siguen en Nueva York en su 114 aniversario
Federico García Lorca


NuUEVA YORK.- Los rincones de Nueva York en los que el escritor Federico García Lorca desgranó un año de su vida y de su poesía se pueden visitar en una ruta, así como contemplar una exposición con la que, desde hoy, se le rinde homenaje en el 114 aniversario de su nacimiento.

"Nueva York estremeció a García Lorca, dejó en él un impacto muy grande, le asombró con su modernidad y su pujanza industrial, y le hizo reconsiderar su visión y su concepción poética", explicó a Efe el experto Norberto Bogard, quien conduce la ruta en la que se siguen los pasos del poeta para celebrar su nacimiento.

La ciudad de los rascacielos conmemora con actividades como ésta, organizadas por el Instituto Cervantes, la breve pero intensa relación del granadino (1898-1936) con la Gran Manzana, a la que
llegó en 1929 para aprender inglés y que le inspiró para escribir una de sus obras más célebres y rupturistas, "Poeta en Nueva York".

Además, hoy se inaugura la exposición "Geografía postal", una muestra de la correspondencia que entre 1910 y 1960 intercambiaron las familias de García Lorca y del político Fernando de los Ríos
(1879-1949).

Laura García Lorca, sobrina del poeta, dijo a Efe que esta colección "traza un mapa muy interesante en la historia de dos familias alejadas por el exilio".

Estas postales, que se enviaron diversos miembros de ambas familias desde distintas partes del mundo, y en las que pueden verse una gran variedad de monumentos, paisajes y hoteles, guardan "un
equilibrio entre su interés visual y los textos que contienen",
según García Lorca, quien conservaba estas epístolas.

Las misivas, algunas escritas de puño y letra del autor de "La casa de Bernarda Alba" y sus parientes, "dan unas pinceladas muy ules para dibujar un mapa de la diáspora que sufrieron estas ersonas a causa de la guerra", apuntó García Lorca, quien añadió ue "es importante que esta historia sea conocida por nuevos úblicos".

También se da a conocer el itinerario personal de este poeta universal durante su estancia en Nueva York, a través de una ruta por los lugares que frecuentó y que fueron escenario de su vida y del desarrollo de su obra artística.

Este recorrido parte de la Universidad de Columbia, en cuya residencia se alojó, y que se convirtió para él en "su sede, su refugio, su oasis, porque llegó a Nueva York muy deprimido, en una etapa de gran dolor, y, durante los primeros meses, se solía quedar en su cuarto, tocando el piano y reflexionando", explicó Bogard.

Sin embargo, la vivacidad de Nueva York pronto logró subyugar al poeta, quien se zambulló de lleno en el torbellino urbano con largos aseos por la avenida de Riverside Drive, por sus iglesias y su
sinagoga, así como por el aledaño barrio de Harlem, en el que se vio atrapado por la cultura afroamericana y los sones del jazz en los  locales de moda.

Además, debido a su reconocida posición en España, donde ya se había forjado un nombre, García Lorca era invitado con asiduidad a la cercana Casa Hispánica, en la que hoy se puede ver una placa que
recuerda su estrecha relación con esta institución, y en la que ofrecía conferencias y conciertos de piano.

El instrumento todavía se conserva en la misma sala donde él pulsaba sus teclas, acompañado por cantantes como Encarnación López "La Argentinita".

"Esta ciudad vibrante, un auténtico puntal tecnológico y moderno, le estremeció e impregnó su obra con una visión muy dinámica, fuerte y moderna", afirmó Bogard, refiriéndose particularmente al poemario

"Poeta en Nueva York", que el experto calificó de "hermoso, estridente, visionario y vanguardista todavía hoy".

 Adjetivos que, según Bogard, nacen del "asombro y el impacto que produjo Nueva York en García Lorca", que también se trasluce en las cartas a su familia y en las que "exageraba un poquito, porque era
un hombre apasionado, que lo vivía todo muy intensamente".


Bogard citó como ejemplo una en la que describía la desesperación por la crisis económica de 1929 que acuciaba a los inversores de Wall Street.

García Lorca llega a afirmar en ella "que había visto a tres personas que habían saltado desde los rascacielos estrellándose a sus pies, lo que es un poquito exagerado".

También se le rendirá tributo el 13 de junio con la presentación del libro "El amante uruguayo", del peruano Santiago Roncagliolo, que recrea la relación de Lorca con el escritor Enrique Amorim,
cubierta de incógnitas, como su parte de responsabilidad en el asesinato del poeta, si él robó el cadáver del bardo o si fue su amante en Argentina.