¡No paso un San Valentín más sola!

¿Pasaste el fin de año solita? ¿Y vas por el mismo camino este San Valentín? Sólo depende de ti que el próximo año no se repita. ¿Porqué te has resignado a seguir sola? Cuando no somos capaces de movernos frente a una situación que nos afecta, es muy probable que estés asociando más dolor que placer al cambio. Y esta actitud hoy la puedes cambiar, ¡porque mereces darte una oportunidad!

Cómo cambiar la actitud para volver a intentarlo  

+ ¿Qué dolor asocias a volver a tener pareja o a casarte? Anota todas las cosas negativas que se te ocurren al respecto.

+ Haz una lista ahora de todo de lo que te estás perdiendo por no cambiar, por no tener pareja.

+ Piensa y anota todos los precios que has pagado y que vas a seguir pagando por no tenerla en 1, 3, 5 años.

+ Ahora piensa y anota todo lo que tendrías si desde ya te decidieras a que quieres alguien en tu vida. Cómo sería tu vida en 1, 3, 5 años. Qué harías con una pareja... No tengo que decírtelo... ¡pícara! ¿A dónde irías? ¿Con quiénes compartirías? ¿Cuánta alegría, plenitud o sensualidad tendrías?

Este ejercicio puede aportarte todo lo que necesitas para moverte y entrar en acción.

Plan de acción 

1. ¿Qué es exactamente lo que quieres? Debes estar clara en esta parte. ¿Qué es lo más importante para ti a nivel de valores [emociones positivas que más te gusta experimentar] amistad, alegría, amor, paz, felicidad, compañerismo, complicidad, sexualidad, empatía? Tenlos claros, porque si una vez en una relación no las tienes, comienza la vocecita en tu cabeza a decirte ‘preocúpate, que algo anda mal'. Y en ese momento la relación se vuelve tormentosa y no lo pasas bien. Haz una lista de qué quieres. Comportamiento, hábitos, físico, profesión, que sea para ti innegociable. Porque tener esto claro desde antes de involucrarte te va a permitir no caer en la tentación de descubrirlo ya metida en el lío. 

2. Sal. No puedes esperar que el hombre de tus sueños llegue un día y toque a la puerta para preguntarte si sigues soltera [a una conocida le pasó, pero no creo que debamos arriesgarnos, ¿verdad?]

3. Planea. Estamos hablando deeeeel hombre de tu vida, del padre [o padrastro] de tus hijos. Haz tu lista de lo que deseas. La ropa y los zapatos nos toma tiempo elegirlos, ¿porqué para una relación seria vamos a aceptar lo primero que nos ofrezcan? ¡Noooop!

Analiza a qué lugares y en qué horarios socializa un hombre como el que quieres. Ahora que se acercan las fiestas de Navidad hay muchas excusas para encontrar gente nueva y no tan nueva en diversidad de alternativas. Planea de 1 a 2 veces por semana acudir a estos lugares.

4. Sé alguien con quien quisieras casarte.  A veces hacemos nuestra lista de las cosas que queremos en un hombre y las que no soportaríamos. Pero si a solas, en un yo con yo, nos miráramos al espejo, ¿serías capaz de preguntarte: soportaría yo vivir conmigo misma cada día y cada noche de mi vida? Revísate y haz los ajustes necesarios, no esperes de nadie algo que no seas capaz de dar. 

5. Termina con el tente ahí. Haz lo correcto para que puedas exigir que se haga lo mismo contigo.

6. Sé feliz. Antes de conocerlo debes ser alguien con quien se quiera estar. Muchas mujeres estamos esperando que llegue un hombre a nuestras vidas para que nos dé vida. Pero el hombre sano que detecta esto sale corriendo. Una relación es la elección de una vida compartida, donde yo soy yo y soy valiosa antes de conocerte. Tú me complementas, no me completas [son 2 verbos distintos].

Prepárate y ponte linda: de adentro hacia fuera. Porque tú mereces tener a alguien en tu vida, que esté loco por ti y te haga sentir amada, cuidada, deseada, orgullosa y valiosa. Alguien que por tu parte merezca admiración, entrega, cariño, lealtad y compromiso.

¡Créelo y verás cómo ocurre! ¡Te deseo desde ahora muchísima suerte!




La autora es coach internacional certificada acreditada por World Coaching Corp, IAC, Village Coach. info@kirssylorenzo.com

Diario Libre