José Cestero, un artista que plasma vivencias personales a sus creaciones
El destacado pintor, reconocido con el Premio Nacional de Artes Plásticas compartió sus anécdotas en la tertulia sabatina que realiza el Museo Bellapart
Jeury Frías
SANTO DOMINGO. “Yo pinto porque me gusta....Mis obras se basan en realidades, no en sueños”, con esta frase, el pintor dominicano José Cestero, recientemente galardonado con el Premio Nacional de Artes Plásticas, se explicaba ante los presentes en la “Tertulia sabatina. Una obra, un artista”, que realiza el Museo Bellapart.
“Los paisajes que he creado en mis obras se deben a vivencias personales que tuve durante toda mi vida”, reiteró.
Cestero compartió por casi dos horas, las anécdotas, inspiraciones y situaciones que le ayudaron a trillar el camino para convertirse en uno de los artistas plásticos más destacados de la República Dominicana, reconocido internacionalmente y valorado por colegas suyos y conocedores del arte.
Con la determinación que caracteriza a las mentes creativas y artísticas, el maestro Cestero expresó que sus obras no le representan un esfuerzo extraordinario, sino, que son el producto de una amplia concepción del arte, que le permite fluir y plasmar las ideas, una vez que escoge los colores.
“Lo más difícil, sí se puede decir que haya algo, es escoger los colores, tener los tonos adecuados para plasmar en una obra, lo que esperas que el público perciba cuando observa una de mis creaciones”, expresó.
“Cuando yo estoy pintando ni cuenta me doy, estoy concentrado en lo que estoy sintiendo, porque vivo el arte de forma dramática, dejando fluir mis ideas”, señaló, mientras era el centro de las miradas de los expectantes testigos de la tertulia.
Para Cestero, que se considera amante del personaje creado por Miguel de Cervantes, ”Don Quijote”, la inspiración no tiene un lugar en específico, pues aunque considera que cada artista tiene su espacio peculiar para desarrollar su arte, en su caso esto no es tan estricto, ya que puede realizar una obra sin importar el espacio físico.
“No tengo un lugar preferido para pintar, lo hago en cualquier parte, en ese sentido me considero un marino frustrado, me adapto a cualquier entorno, solo debo estar inspirado y las creaciones llegan, adujo.
Sus inicios
El unánime ganador del Premio Nacional de Artes Plásticas 2015, realizó un repaso de los hechos trascendentales que le ayudaron a formar como pintor, como su viaje a Estados Unidos, tras negarse a realizar en el servicio militar obligatorio que debía hacerse por imposición del dictador Rafael Leónidas Trujillo.
Nombró además, su regreso al país, tras la muerte del tirano, y como él y otros pintores de la época realizaban encuentros, tertulias y exposiciones.
El cine y la música de los 50 y 60 también le ayudaron en su formación como creador artístico, entre las que mencionó el cine mexicano, así como el buen cine estadounidense de la época.
Algo que sí es constante en el artista, es la influencia de la arquitectura en su bra, en especial, todo lo que se vive en la ciudad colonial de Santo Domingo.
Las tertulias sabatinas
Con un salón repleto de personas, El Museo Bellapart, ubicado en el quinto piso del edificio Honda, de la Avenida John F. Kennedy, continuó con el conversatorio con el maestro José Cestero, las tertulias sabatinas, como una forma de acercar a los grandes artistas plásticos con los amantes de esta disciplina. La entrada es gratuita.
Jeury Frías
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