Ciudadanos del mar

Pequeñas embarcaciones eléctricas transportarán a las personas desde la costa más cercana a Oceanix City.
Los tejados ventilados de los edificios generan su sombra, y las terrazas sombreadas abrazan los confortables espacios interiores y exteriores, proyectándose al ámbito público y con vistas al mar.
Los residentes se reúnen, trabajan y se divierten en el vecindario de África, en un ámbito público muy activo, y una serie de terrazas facilitan la vida interior y exterior y fomentan la socialización con los vecinos.
La arquitectura de cada plataforma o vecindario modular, como por ejemplo el del Sudeste de Asia, será específica para ese sitio y responderá a los aspectos ambientales y económicos de cada localidad.
Igual que el anterior, pero refiriéndose al vecindario de Medio Oriente.
La agricultura comunitaria tanto en invernadero como al aire libre, será el corazón de cada uno de los barrios, permitiendo a los residentes compartir el intercambio de cultura y el uso de sistemas de cultivo con cero residuos. Allí, los residentes cultivarán su propia comida.
Una plataforma flexible, flotante y con bordes bajos, acomodará la producción de comestibles, los muelles para embarcaciones, los cortavientos y los espacios de reunión, y permitirán a los residentes el acceso directo al agua.
Con el tiempo, la ciudad puede evolucionar, transformarse y adaptarse orgánicamente, pasando de ser un vecindario de 300 residentes a una metrópolis de 10,000 personas, formada por treinta y seis barrios flotantes de 2 hectáreas cada uno y habitados por una comunidad vibrante.
Por debajo del nivel del mar, por debajo de las plataformas, habrá arrecifes flotantes de ëbiorocaí, así como cultivos de algas, ostras, mejillones, vieiras y almejas, que limpiarán el agua y acelerarán la regeneración del ecosistema.
La socialización, el juego y el comercio estarán concentrados alrededor del puerto interior protegido de la plataforma, en cuyos bordes se desarrollará una vida muy activa, atracarán las embarcaciones pequeñas y se producirán alimentos, a salvo del viento.
Por la noche, continuará la vibrante actividad en el puerto interior, en los mercados nocturnos, los espacios para eventos y las residencias, creando una comunidad muy animada.