Autobús turístico busca ser el escaparate móvil de los atractivos de Asunción

ASUNCIÓN. El primer autobús turístico de Asunción, que emprendió hoy su viaje inaugural, busca convertirse en el escaparate móvil de los encantos de la capital paraguaya, desde su casco histórico y sus zonas residenciales hasta su bahía, donde la ciudad mira al río Paraguay.

El vehículo, entre cuyos pasajeros viajaban periodistas y autoridades como el intendente de la ciudad, Arnaldo Samaniego, partió desde la sede de la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur), en la céntrica calle Palma, para luego circular alrededor de los principales monumentos del casco histórico asunceno.

Así, los viajeros se deleitaron con la vista del Panteón de los Héroes, donde están enterrados los principales próceres paraguayos, con el estilo colonial del edificio de El Cabildo, con la arquitectura de la vieja Catedral y con el majestuoso Palacio de López, sede del Gobierno y una de las postales más conocida de Asunción.

Y de ahí hacía la modernidad, representada por los barrios residenciales de Villa Morra y Carmelitas, que concentran las viviendas más costosas y las sedes de hoteles, empresas y negocios internacionales.

Como final de ruta, el autobús toma la avenida Costanera, donde a un lado se observa el perfil de los edificios y cúpulas de la ciudad y al otro el cauce de la bahía de Asunción, rodeado por una zona de humedales y refugio de aves acuáticas.

La titular de Senatur, Marcela Bacigalupo, que no quiso perderse el paseo, dijo a Efe que la iniciativa era una de las asignaturas pendientes de la capital paraguaya en cuanto a turismo se refiere.

"Asunción hoy se está posicionando para ofrecer lo que las grandes capitales ya tienen: un recorrido guiado por los sitios importantes del centro histórico y otros de amplio movimiento en la ciudad", dijo Bacigalupo.

Sin embargo, Asunción no escapa de su realidad y el itinerario deja al descubierto tanto sus luces como sus sombras: sus flamantes edificios históricos, pero también la degradación de sus palacetes abandonados en el casco antiguo.

Otro contraste es el creado entre las lujosas torres de rascacielos y las paupérrimas viviendas de chapas de madera de los asentamientos de emergencia, levantados para alojar a los desplazados por la última crecida del río Paraguay, en junio pasado.

Esa disparidad se hace evidente al paso del autobús por la Catedral y el Cabildo, edificios que bordean el barrio de La Chacarita, uno de los más antiguos de Asunción, pero también uno de los más humildes y vulnerables a las inundaciones por su proximidad con la bahía.

"Los barrios marginalizados existen también en otras ciudades, como Sao Paulo o Río de Janeiro. Aunque La Chacarita tiene zonas peligrosas, estamos trabajando para convertirlo en un barrio turístico y que la gente vea que sus habitantes son amables y cálidos y merece la pena visitar el lugar", explicó a Efe Juan Aníbal Gómez, uno de los guías turísticos.

Asunción también muestra su lado más exhuberante, que el pasado año le hizo ser designada Capital Verde de Iberoamérica y que se comprueba desde las ventanas del autobús cuando este se oxigena circulando por las extensas zonas arboladas de la ciudad.

El recorrido, de unas tres horas, pretende ser diversificado en el futuro con la organización de viajes temáticos, como un trayecto dedicado al fútbol, una de las pasiones de los paraguayos.

Ese mapa urbano incluiría visitas a los principales campos de fútbol de Asunción como "la Olla azulgrana", como se conoce popularmente al césped de Cerro Porteño, y a la sede de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), que representa la historia futbolística del continente.

La iniciativa se suma al proyecto de rehabilitación del centro histórico de Asunción, un plan en el que participan las instituciones gubernamentales y que pretende, entre otras mejoras, que el corazón de la ciudad recupere su antiguo esplendor, perdido tras la marcha de sus vecinos a otras zonas más alejadas.