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Los tradicionales coches de Santiago están en extinción

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Los tradicionales coches de Santiago están en extinción
Los coloridos coches de Santiago, una imagen tradicional que desaparece paulatinamente. (ANEUDY TAVÁREZ)

SANTIAGO. El transporte de coche tirado por caballos y que era una tradición centenaria en esta ciudad, desapareció, luego de que la alcaldía incautara 18 equipos y 8 de los animales tuvieron que ser sacrificados por las autoridades de la Dirección General de Ganadería, al dar positivo a la enfermedad Anemia Infecciosa Equina (AIE).

Ante esa situación, los cocheros de la ciudad anunciaron su disposición de llevar ante los tribunales de Justicia al alcalde local, Abel Martínez, por entender que tiene responsabilidades en el sacrificio de sus caballos.

Empero, Fernando Ramírez, vocero oficial de la alcaldía local, declaró a Diario Libre que cualquier ciudadano que se sienta afectado por las acciones de las autoridades municipales puede recurrir a las instancias que considere necesario.

“Nosotros estamos preparados para enfrentar cualquier demanda para lo cual disponemos de un departamento jurídico”, subrayó Ramírez.

Asimismo, dijo que el Ayuntamiento actuó apegado a la ley 248-12 sobre protección de animales y dijo que los cocheros al igual que los caballos, son víctimas de sus propietarios, quienes a su juicio, no atienden debidamente a los equinos.

Máximo Paulino, Santiago Almonte, Hidalgo Pichardo y Carlos Antonio Castro dijeron que en total en esta ciudad 40 cocheros han dejado de trabajar por espacio de un mes, luego de la incautación de los caballos en el área Monumental.

“Ellos (el Ayuntamiento) lo que quieren es eliminar a los cocheros para introducir unos triciclos, que son rechazados por turistas nacionales y extranjeros, ya que les gusta montarse en los coches”, expresó Hidalgo Pichardo.

De su lado, Santiago Almonte, propietario de uno de los caballos sacrificados, declaró que no había justificación para eliminarlo.

“El Amarillo, como le llamaban al caballo, estaba en plena salud, al igual que los otros siete que mataron”, precisó Almonte.

La doctora Marilyn Lois Liranzo, encargada de la unidad de protección animal de la Procuraduría General de la República confirmó que fueron tres veterinarios de la Dirección General de Ganadería, quienes sacrificaron ocho caballos afectados por la Anemia Infecciosa Equina.

Explicó que aplicaron la eutanasia para sacrificar a los animales, mediante inyecciones y que todo obedeció a los resultados obtenidos después de practicarles análisis a todos los ejemplares, que de 18 resultaron ocho positivos.

Dijo que el sacrificio se produjo en una finca en la comunidad de Laguna Salada, de la provincia Valverde, Mao. Los demás caballos permanecen en cuarentena.

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