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Nuevo Domingo Savio
Nuevo Domingo Savio

No encuentran casas al precio que Gobierno pagó por las suyas

Familias viven alquiladas o arrimadas hasta hallar una vivienda

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No encuentran casas al precio que Gobierno pagó por las suyas
A Jonás Villa se le dio 15 días para que abandonara casa.

Algunas de las familias del primer grupo de desalojados en el proyecto del Nuevo Domingo Savio, en los sectores Los Guandules y La Ciénaga, se mantienen arrimadas o alquiladas porque la compensación que recibieron del Gobierno por las viviendas de su propiedad no les alcanza para poder comprar otra.

Este es el caso de Andrea Jimenez Archibó, de 59 años, quien dice duró dos meses buscando una vivienda cuyo costo no sobrepasara los RD$655 mil que le dio la Unidad para la Readecuación de la Barquita y Entorno (URBE) por la suya en el sector Los Guandules cuando fue desalojada en septiembre.

Para que evitara pagar casa en alquiler y gastar los recursos que había obtenido por su residencia, un sobrino la alojó en un local, el cual solo está cercado de rejas y que debía cubrir en la noche para poder dormir con dos hijos adultos desempleados y un nieto de 4 años, en el sector Mejoramiento Social, en el Distrito Nacional.

“Nos hemos cansados de buscar casa, las que aparecen cuestan un millón y un millón doscientos mil”, dice.

"“Yo compro y vendo mercancía. Saqué dinero para alquilar y para yo comer porque no me voy a dejar morir. Dios tiene que ayudarme a mí. "Andrea Jiménez

Andrea tiene una tarjeta de Solidaridad pero el único beneficio que, asegura, recibe es el bonogás, que son (RD$228.00) de subsidio a las amas de casa para la compra del carburante para cocinar.

Al momento de iniciar la entrevista en donde estaba arrimada y en donde duró dos meses, explicó que se gana la vida yendo “al barrio” (Los Guandules) a vender víveres.

No tiene un mes que alquiló con su familia una casa por RD$3,000 en el barrio 27 de Febrero, próximo al mercado y cerca de Los Guandules por lo que, dice, conoce a la mayoría de sus vecinos.

Alquiló inmediatamente

La situación de Jiménez Archibó es parecida a la de la señora Alejandrina Cruz Álvarez, pero con la diferencia de que el esposo de esta última está vivo y trabaja conchando en un carro.

Cruz Álvarez dice que URBE le entregó RD$600 mil por su vivienda de concreto que estaba ubicada en la calle Ricardo Carty, de Los Guandules

Esta mujer vende botellas de agua en las calles y ayuda en la manutención de tres nietos de un hijo que falleció en un motor en un accidente de tránsito. Expuso a Diario Libre que al mudarse rápido, donde vive ahora se le mojan todos sus ajuares.

En esta semana que finalizó, URBE entregaba la copia del cheque a otro grupo de familia ya censadas para que abandonen el área. Algunos se quejaban de que el dinero es poco y no les alcanzará para adquirir otra vivienda. Las quejas son también de los propietarios de las casas, muchas construidas completas de zinc y que las tienen alquilada.

Lorenzo Zapata, propietario de dos viviendas por las que por cada una cobra RD$2,500 para sus medicinas, sostiene que no tiene esperanza porque a muchos inquilinos les están dando más de 200 mil y a los dueños menos de treinta mil.

Se quejó de que el Gobierno les prometió tratarlo dignamente.

El proyecto del Nuevo Domingo Savio contempla resarcir a 1,400 familias de Los Guandules y la Ciénaga para que abandonen la parte de esos barrios próximos al río Ozama que se van a intervenir para aumentar la movilidad en esas zonas y convertirlas en un atractivo para visitantes. Se contempla construir, además, edificaciones culturales y deportivas.

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Infografía
Miriam Familia Sánchez, en una imagen donde trabaja, dice que negocia una casa casi por lo que le pagó el Gobierno por su vivienda en Los Guandules. (DIARIO LIBRE/MARISOL AQUINO)

Piensa quedarse en el mismo sector

La situación de Miriam Sánchez Familia, de 50 años, es diferente. Miriam fue desalojada el 28 de noviembre, también de una casa de su propiedad, pero tiene un trabajo fijo en la Casa Infantil Parroquial San Luis Gonzaga, y su esposo trabaja como seguridad en una empresa privada. A esta familia se le compensó con 614,000.

Sánchez alquiló una casa grande para sus tres hijos de 19, 17 y 15 años, por la que paga RD$3,500 y afirma que negocia una vivienda en el mismo sector que no está incluido en el proyecto del Nuevo Domingo Savio y por la que le piden RD$675 mil.

A Margarita Sánchez, hermana de Miriam, tras evaluar su vivienda la Unidad para la Readecuación de La Barquita y Entorno (URBE) le pagó RD$267.32 mil y se mudó con el nieto que criaba para donde una hija en el sector La Barquita.

Expuso a Diario Libre que al lado de la vivienda de su hija, que es casada y no trabaja, venden un solar por RD$220.00, por lo que no sabe qué hacer porque de adquirirlo no tendría para edificar.

Darío Luciano, presidente de la Junta de Vecinos Los Comunitarios, en Los Guandules, sostuvo que hace dos años cuando se negociaba con el Gobierno el 80% de los residentes de ese sector y La Ciénaga se decidieron por el dinero en vez de la una vivienda porque pensaban que serían bien compensados, como ocurrió cuando se desalojó a algunas personas para la construcción de la segunda línea del Metro de Santo Domingo.

Sostiene que ahora no saben qué hacer con lo que se les está entregando, aunque ya no tienen más opciones.

Propietario se hizo pasar por inquilino

La señora Keila Encarnación, de 28 años, quien tiene tres hijos pequeños, vive con su esposo Robinson Durán Valdéz, en una casucha alquilada por RD$700. Afirma que el propietario se les adelantó y se inscribió como inquilino y es a él a quien le van a entregar los RD$350 mil por la rancheta donde vivien.

Encarnación sostuvo que el dueño acordó con ellos darles la mitad.

El hijo mayor de Encarnación está perdiendo la visión de un ojo por una bacteria que adquirió al caer en un charco próximo a la casa de hojalata en donde viven, y el otro se le explotó hace dos años. Ha recibido varias cirugías y las ayudas que ha recibido esta familia no ha mejorado la condición del menor de nueve años.

En tanto, el joven Jonás Villa, de 18 años, según Encarnación y su pareja Robinson Durán, no estaba en la vivienda cuando fue censada y no apareció su nombre en el listado para la entrega de la compensación aunque luego sí para ser desalojado.

Encarnación y Durán asegura que Villa tiene muchos años viviendo solo en la casucha y se le otorgó 15 días para que la abandone.

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