DESEQUILIBRIO ECOLÓGICO MUNDIAL(*)

Desde los finales del Siglo XX, ante el aumento de los fenómenos anormales del clima, todo el mundo empezó a hablar del Calentamiento Global, del Efecto Invernadero y de un largo etcétera relacionado con el tema, que terminó bautizado como Cambio (s) Climático (s).
Los expertos investigadores, particularmente los agrupados en la respetada IPCC, creada por la ONU en el 1995 para el estudio y la búsqueda de soluciones, se adentraron en el acuciante problema hasta emitir sus importantes resoluciones en Kioto, desafortunadamente, no todos los países participantes se adhirieron a las conclusiones y resoluciones. La IPCC y una serie de instituciones y expertos, ya tienen bien esclarecido el problema y sus soluciones. Estos temas son debatidos actualmente en Copenhague para reemplazar al obsoleto legajo del protocolo de Kioto.
Existe sin embargo una situación subyacente con la frase "cambio climático" que, convertida en lugar común, está enmascarando y situando en un limbo a las causas verdaderas del colosal desorden del medio ambiente mundial.
El mentado cambio climático, con sus pavorosas manifestaciones, no es la causa, sino el efecto, resultado o la consecuencia de la depredación incontrolada de los recursos renovables y del uso excesivo de los recursos naturales irrenovables.
El llamado cambio climático sí es la causa de que los poderosos depredadores continúen sus devastaciones, probablemente amparados en las conclusiones de algunos expertos climatólogos (¿?) que atribuyen este desastre mundial a los fenómenos anormales semejantes a los que en edades antidiluvianas, produjeron las llamadas glasiasiones o extinciones planetarias.
Todas las esperanzas están fijadas en Dinamarca para que el afán de lucro y el egoísmo pueda ser detenido antes que toda la humanidad sea víctima de la catástrofe que tendremos que enfrentar, tal vez cuando sea demasiado tarde, por la destrucción de los recursos naturales en una fracción de los millones de años que le tomó construirlos a la Madre Naturaleza, como un legado permanente para el beneficio de nuestra generación y de las generaciones venideras. ¡Y Madre Natura nos está cobrando el daño, a justos y a pecadores! Así, nos vemos ante la imperiosa necesidad de enfrentar inundaciones imprevistas y poderosas, ciclones, tornados, tifones, sequías, desertificaciones, aumento de la temperatura, derretimiento de los hielos "eternos" elevación de las cotas marinas, fuegos incontrolables, desaparición de humedales, migraciones obligadas, aumento de la pobreza, hambrunas, extinciones de especies vegetales y animales, contaminación de las aguas y suelos, aumento de las enfermedades, millones de muertes y otro largo etcétera de males que están compitiendo en una carrera global hacia la meta diabólica de la deshidratación de nuestra biosfera su desaparición.
Desgraciadamente, las estadísticas demuestran realidades que no son representaciones orsonwellianas. Estamos escribiendo para el común denominador de la gente, que debe ser concientizada individual y conjuntamente. Así, todo el mundo debe conocer lo que son y como actúan los recursos naturales. Los Recursos Naturales Irrenovables, que se formaron por la acción biológica y físico-química sobre la materia orgánica de bosques de enormes especies (sequoia) y (¿animales?) fueron enterrados por grandes cataclismos, hace millones de años, hasta formar grandes bolsones transformados en petróleo mayormente, que como sabemos, cuando se agoten no habrás más. Su uso emite gases de efecto invernadero, que contribuyen al calentamiento global del planeta.
Los recursos naturales renovables constituyen un organismo vivo y funcional que fueron creados durante millones de años para una sola finalidad: albergar y favorecer la vida. Esta es la principal función de cada recurso, aunque además poseen dos características más que los identifica: b) se reproducen y, c) interactúan entre sí.
Cada uno aporta sus funciones al organismo a que pertenece, de modo similar a la función que realiza cada órgano del cuerpo humano para su buena salud.
Generalmente se mencionan cinco recursos en los textos didácticos: el agua, el bosque, el aire, el suelo y la fauna. Nos tomamos la libertad de incluir y designar como recursos naturales a otros componentes que poseen las otras características que los identifican como Recursos Naturales Renovables, son:
2.- Los recursos naturales renovables complementarios: La capa de ozono, el calentamiento global- efecto invernadero, (cuando operan en condiciones normales) las corrientes marinas, la radiación solar, el trinomio de la fuerza gravitacional del planeta Tierra-Luna-Sol.
3.- Los recursos naturales renovables inmanentes, creados o no por el hombre son: el instinto, el conocimiento, el tiempo, el espacio, los tropismos y las mutaciones.
Esta lista no es limitativa. Otros componentes pueden incorporarse, siempre que exhiban las tres características que identifican a los Recursos Naturales Renovables.
4.- Por último, incluimos al hombre, que por razones obvias es el principal recurso.
Incluir una breve descripción de cada recurso, está fuera del alcance de este escrito. Bástenos reiterar, nueva vez, que el daño infligido a uno cualquiera, se refleja en el organismo que agrupa a todos, y que su destrucción implica la desaparición de la vida en nuestro planeta.
*Resúmenes de la obra "El Desequilibrio Ecológico mundial" (en preparación) del Autor.
Los expertos investigadores, particularmente los agrupados en la respetada IPCC, creada por la ONU en el 1995 para el estudio y la búsqueda de soluciones, se adentraron en el acuciante problema hasta emitir sus importantes resoluciones en Kioto, desafortunadamente, no todos los países participantes se adhirieron a las conclusiones y resoluciones. La IPCC y una serie de instituciones y expertos, ya tienen bien esclarecido el problema y sus soluciones. Estos temas son debatidos actualmente en Copenhague para reemplazar al obsoleto legajo del protocolo de Kioto.
Existe sin embargo una situación subyacente con la frase "cambio climático" que, convertida en lugar común, está enmascarando y situando en un limbo a las causas verdaderas del colosal desorden del medio ambiente mundial.
El mentado cambio climático, con sus pavorosas manifestaciones, no es la causa, sino el efecto, resultado o la consecuencia de la depredación incontrolada de los recursos renovables y del uso excesivo de los recursos naturales irrenovables.
El llamado cambio climático sí es la causa de que los poderosos depredadores continúen sus devastaciones, probablemente amparados en las conclusiones de algunos expertos climatólogos (¿?) que atribuyen este desastre mundial a los fenómenos anormales semejantes a los que en edades antidiluvianas, produjeron las llamadas glasiasiones o extinciones planetarias.
Todas las esperanzas están fijadas en Dinamarca para que el afán de lucro y el egoísmo pueda ser detenido antes que toda la humanidad sea víctima de la catástrofe que tendremos que enfrentar, tal vez cuando sea demasiado tarde, por la destrucción de los recursos naturales en una fracción de los millones de años que le tomó construirlos a la Madre Naturaleza, como un legado permanente para el beneficio de nuestra generación y de las generaciones venideras. ¡Y Madre Natura nos está cobrando el daño, a justos y a pecadores! Así, nos vemos ante la imperiosa necesidad de enfrentar inundaciones imprevistas y poderosas, ciclones, tornados, tifones, sequías, desertificaciones, aumento de la temperatura, derretimiento de los hielos "eternos" elevación de las cotas marinas, fuegos incontrolables, desaparición de humedales, migraciones obligadas, aumento de la pobreza, hambrunas, extinciones de especies vegetales y animales, contaminación de las aguas y suelos, aumento de las enfermedades, millones de muertes y otro largo etcétera de males que están compitiendo en una carrera global hacia la meta diabólica de la deshidratación de nuestra biosfera su desaparición.
Desgraciadamente, las estadísticas demuestran realidades que no son representaciones orsonwellianas. Estamos escribiendo para el común denominador de la gente, que debe ser concientizada individual y conjuntamente. Así, todo el mundo debe conocer lo que son y como actúan los recursos naturales. Los Recursos Naturales Irrenovables, que se formaron por la acción biológica y físico-química sobre la materia orgánica de bosques de enormes especies (sequoia) y (¿animales?) fueron enterrados por grandes cataclismos, hace millones de años, hasta formar grandes bolsones transformados en petróleo mayormente, que como sabemos, cuando se agoten no habrás más. Su uso emite gases de efecto invernadero, que contribuyen al calentamiento global del planeta.
Los recursos naturales renovables constituyen un organismo vivo y funcional que fueron creados durante millones de años para una sola finalidad: albergar y favorecer la vida. Esta es la principal función de cada recurso, aunque además poseen dos características más que los identifica: b) se reproducen y, c) interactúan entre sí.
Cada uno aporta sus funciones al organismo a que pertenece, de modo similar a la función que realiza cada órgano del cuerpo humano para su buena salud.
Generalmente se mencionan cinco recursos en los textos didácticos: el agua, el bosque, el aire, el suelo y la fauna. Nos tomamos la libertad de incluir y designar como recursos naturales a otros componentes que poseen las otras características que los identifican como Recursos Naturales Renovables, son:
2.- Los recursos naturales renovables complementarios: La capa de ozono, el calentamiento global- efecto invernadero, (cuando operan en condiciones normales) las corrientes marinas, la radiación solar, el trinomio de la fuerza gravitacional del planeta Tierra-Luna-Sol.
3.- Los recursos naturales renovables inmanentes, creados o no por el hombre son: el instinto, el conocimiento, el tiempo, el espacio, los tropismos y las mutaciones.
Esta lista no es limitativa. Otros componentes pueden incorporarse, siempre que exhiban las tres características que identifican a los Recursos Naturales Renovables.
4.- Por último, incluimos al hombre, que por razones obvias es el principal recurso.
Incluir una breve descripción de cada recurso, está fuera del alcance de este escrito. Bástenos reiterar, nueva vez, que el daño infligido a uno cualquiera, se refleja en el organismo que agrupa a todos, y que su destrucción implica la desaparición de la vida en nuestro planeta.
*Resúmenes de la obra "El Desequilibrio Ecológico mundial" (en preparación) del Autor.
Diario Libre
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