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Redes Sociales

Gestión del talento humano diverso, la estrategia que apuntalará la recuperación de la economía en RD

Desde el Proyecto de Formación Técnico Profesional Inclusiva (FOCO) se tiene el objetivo de capacitar a personas con diversidad funcional a través del Instituto de Formación Técnico Profesional (Infotep)

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Gestión del talento humano diverso, la estrategia que apuntalará la recuperación de la economía en RD
Diversas instituciones trabajan unidas para generar oportunidades a través de la Formación Técnico Profesional Inclusiva. (FUENTE EXTERNA)

El COVID-19 dejó y continúa dejando muchos aprendizajes. Una enfermedad desconocida convertida rápidamente en pandemia sacudió al mundo desde sus cimientos, y generó un panorama de incertidumbre generalizado en el que preservar la salud se impuso ante cualquier otra prioridad.

La paralización de las actividades económicas, como consecuencia del confinamiento para mitigar la expansión del contagio por coronavirus, supuso una disrupción al trabajo presencial y un redescubrimiento de las herramientas tecnológicas como alternativa para dinamizar aquellos segmentos del aparato productivo que pueden prescindir del contacto físico para sus operaciones.

Los segmentos comerciales que no corrieron con esa suerte y se catalogaron como no esenciales tuvieron que cerrar sus puertas o limitar sus actividades. Esto incidió en un aumento de las tasas de desempleo dentro del mercado formal -solo en turismo se vieron amenazados más de 100 millones de empleos en todo el mundo, de acuerdo a la Organización Mundial del Turismo (OMT)– y en el desplome de los medios de vida de quienes trabajan al margen de la regularización.

Si bien es cierto que los bancos centrales implementaron políticas monetarias para inyectar liquidez a los sectores productivos y aliviar la carga de la crisis, a través de subsidios por concepto de desempleo y otras ayudas sociales, estos no fueron suficientes para impedir el decrecimiento de 2.6 puntos porcentuales que presentó la tasa de desocupación de América Latina, con respecto al 2019; concluyendo 2020 en una tasa de desempleo de 10.7%, de acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

La Tesorería Nacional reportó que República Dominicana perdió más de 180,000 empleos en 2020 solo del sector privado, responsable de la generación del 65% de puestos de trabajo en el país.

Estabilizar la dinámica económica para apuntalar la ansiada recuperación es una problemática multifactorial que requiere de una solución a la altura de las circunstancias. ¿Qué deben de tomar en cuenta los directivos empresariales para elaborar una estrategia que reactive la captación de capital humano y los prepare para afrontar futuras crisis?

Ahora más que nunca, los entornos laborales postpandemia deben implementar políticas que prioricen la diversidad de talentos, para poder abordar problemas desde perspectivas innovadoras, diferenciadoras y universales; a la vez que sienten la cultura organizacional sobre la base de la promoción de la inclusión laboral para contribuir a que cada día se estrechen más las brechas de desigualdad social.

Un plan de gestión empresarial orientado en la integración de personas de diferentes culturas, religiones, edades, orientaciones sexuales, condiciones físicas o de discapacidad; funcionará como un catalizador para acelerar el desarrollo humano pleno, a través de la participación de todas y todos en la dinámica económica.

La organización Red Acoge enfatiza en su estudio, “El plan de gestión de la diversidad en la empresa”, que retener y atraer talento diverso “es muy relevante en la medida en que permite reconocer nuevos patrones de consumo surgidos de una sociedad diversa, con nuevas formas de pensar y trabajar, en la medida en que permitirá impulsar la innovación, entendida (...) (dentro) de la globalidad de la empresa”.

En otras palabras, este modelo de planificación se traduciría en beneficios económicos y sociales, desde el marco de la responsabilidad social.

La comunidad con algún tipo de diversidad funcional en República Dominicana asciende a 1,160,000 personas, de acuerdo con el IX Censo de Población y Vivienda. El 65.9% tienen entre 15 y 64 años, por lo que se encuentran en edad productiva para trabajar, pero la falta de inclusión laboral hace que más del 67% se encuentren sin trabajo (Enhogar, 2013).

Dicho de otro modo, el mercado laboral desaprovecha los talentos que, desde la diversidad, el 12.3% de la población dominicana tiene para aportar. Esto debido a barreras sociales que perpetúan la exclusión y vulneran su autonomía, lo que también limita su acceso oportuno al consumo.

Gestionar desde la diversidad es una inversión de bajo costo para las empresas a corto, mediano y largo plazo. Supone contar con una batería de talentos que, desde sus diferentes ópticas, puedan aportar innovación, aumentar los niveles de productividad de los equipos de trabajo y robustecer el mercado laboral a través de ajustes razonables a los planes de contratación laboral y la adecuación física y tecnológica de los entornos organizacionales.

Además de mejorar su posicionamiento y su reputación, la Ley 05-13 sobre Discapacidad en República Dominicana ofrece exenciones a las empresas que promocionan políticas de igualdad laboral, lo que supone un alivio tributario para los directivos en el momento en que sus compañías más lo necesitan.

En lo que respecta al Estado, cuya gestión administrativa ha logrado aunar los esfuerzos de sectores públicos y privados para el diseño de planes contingentes que respondan a la pandemia, la definición de políticas públicas orientadas a una mayor integración de personas al mercado laboral en igualdad de condiciones traerá como consecuencia la reducción de subsidios por desempleo y otros programas de protección social; y mejorará así la calidad del gasto público.

Esta no es una tarea para el futuro: Este es el presente. De hecho, República Dominicana ha dado un paso firme en esa dirección, con la puesta en marcha del Proyecto de Formación Técnico Profesional Inclusiva (FOCO); con el objetivo de capacitar a personas con diversidad funcional a través del Instituto de Formación Técnico Profesional (Infotep). Los participantes podrán escoger entre distintas áreas de formación en formato accesible, de modo que puedan potenciar sus oportunidades de ser contratados por cualquier oficina pública, empresa o negocio.

La iniciativa, resultado de un convenio pactado por la institución pública con la Red Iberoamericana de Entidades de Personas con Discapacidad (La RED), la Fundación Francina y la participación de otras entidades; cuenta con el auspicio de la Unión Europea, a través de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Además, contempla impartir el Diplomado en Inclusión Laboral de Personas con Discapacidad con Enfoque de Género y Derechos Humanos, dirigido a participantes del sistema de formación técnico profesional y del área de recursos humanos de diferentes empresas; que aprenderán a desarrollar planes de gestión de diversidad.

La gestión del talento humano diverso es el único paradigma de cultura corporativa y productividad coherente con las necesidades de desarrollo humano sostenible a nivel global. La República Dominicana avanza en esa dirección; aún así hacen falta muchos más esfuerzos para que los sectores productivos apliquen en sus espacios laborales ajustes razonables para que todas las personas puedan participar de la dinámica económica en total integración y autonomía.

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