Argentina debate norma para regular venta en supermercados
BUENOS AIRES (AP) — El Senado argentino debatía el viernes un polémico proyecto de ley que buscar regular la comercialización de alimentos y otros productos en supermercados con el supuesto objetivo de alentar la competencia en un mercado altamente concentrado y poner un freno a la inflación.
La iniciativa, conocida popularmente como “Ley de góndolas”, ya que entre sus puntos fija el porcentaje de espacio disponible en las estanterías para cada marca, es rechazada por los empresarios de las grandes cadenas de supermercados por considerar que viola la libertad de comercio.
Entre sus fundamentos, el proyecto impulsado por distintas fuerzas del Parlamento, entre ellas el oficialista Frente de Todos, aspira a regular la competencia entre las marcas de alimentos y otros productos de primera necesidad, ya que entiende hay empresas que abusan de su posición dominante. Ante más competencia en los supermercados, sostienen los autores, bajarán los precios.
Alimentos es uno de los rubros que más empujan la inflación en Argentina, que en 2019 fue de 53,8% y mantuvo su ritmo en el inicio del año al reportarse una variación mensual de 2,3% en enero.
“En las últimas décadas se ha creado un gran proceso de concentración en la comercialización. Entre un 74% y un 78% de todos los productos que se comercializan están en manos de seis cadenas grandes de supermercados', argumentó la senadora oficialista Ana Almirón, una de las impulsoras del proyecto que recibió media sanción de la Cámara de Diputados en noviembre pasado.
“Para millones de argentinos ir al supermercado hoy es muy engorroso, el salario no permite ni siquiera llegar a la canasta familiar (mientras) un montón de empresarios se enriquecen a costa del hambre de los argentinos”, agregó.
De sancionarse, la reglamentación afectará a marcas de alimentos, bebidas y artículos de limpieza y tocador.
Los supermercados deben ofrecer al menos cinco marcas distintas de un mismo producto por góndola. Dentro de ese total, un cuarto se reserva a productos elaborados por pequeñas y medianas empresas nacionales.
También obliga a dar mejor visibilidad a los productos de menor valor.
Se crea además un observatorio para controlar la aplicación de la futura ley.
“No existen antecedentes internacionales de una norma semejante”, se quejó el senador Ernesto Martínez Carignano, de la coalición opositora Cambiemos. “Andar midiendo góndolas con un centímetro pasa por un ridículo legislativo del cual es difícil de volver. La ley que aprobaremos no servirá absolutamente para nada”.
A su vez desde las cadenas de supermercados calificaron la propuesta de intervencionista; advirtieron que no podrán aplicarla porque la oferta de productos no es suficiente y adelantaron que irán a la justicia.
Se descontaba la votación de la norma con el voto del oficialismo y de otras fuerzas aliadas.