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Asesinatos
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Artista del tatuaje se declara asesino en serie con 32 víctimas

Nicholas Brent Gibson fue detenido en medio de una intensa búsqueda nacional, después que asesinó al anciano Erik Stocker, de 77 años, en Miami Beach en abril

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Artista del tatuaje se declara asesino en serie con 32 víctimas
El presunto asesino en serie Nicholas Brent Gibson mientras era trasladado por dos policías. (FUENTE EXTERNA)

Nicholas Brent Gibson, artista del tatuaje radicado en Florida también conocido como “El Salvaje Brent” (Savage Brent), y capturado por la policía en el Metro de la ciudad hace dos semanas, se declaró un asesino en serie que le ha quitado la vida a 32 personas desde que tenía 12 años de edad.

Gibson, de 32 años, fue detenido en medio de una intensa búsqueda nacional, después que asesinó al anciano Erik Stocker, de 77 años, en Miami Beach en abril de este año, y fue presentado ante un juez el viernes en la corte criminal del distrito de Manhattan, luego de confesarle a los investigadores los crímenes que habría cometido en diferentes estados y fechas, desde el año 2000, cuando tenía 12.

El presunto asesino en serie trabajó también como empleado de un restaurante de la cadena Dunkin 'Donuts y bartender en Florida, y cuidaba como Home Atender a Stocker en el hogar del anciano.

Asesinó a Stocker usando una espada Samurai y le dijo a los reporteros en Manhattan, que lo mató con sus propias manos.

Añadió que descuartizó el cadáver del anciano con la misma espada, pero el FBI se ha involucrado en la investigación para confirmar si ciertamente Gibson mató a 32 personas.

Stocker compartía una vivienda con el artista en Florida.

“Él se quería ir”, respondió a preguntas de un reportero respecto al motivo que tuvo para asesinar al anciano.

Gibson también fue condenado por agresión sexual.

Renunció a una audiencia de extradición a Florida, donde tendrá que responder por los cargos en el asesinato de Stocker, y será enviado a ese estado por su voluntad.

Vistiendo el traje color canela que generalmente colocan a los sicópatas, amarrado con cadenas desde la cintura hasta los pies y con un grillo, Gibson, se mostró desafiante y sonreía a las cámaras mientras era transportado en custodia por oficiales del Servicio de Alguaciles de Estados Unidos (US Marshalls) desde la corte a la cárcel.

En su confesión a la policía, aseguró que mató a un hombre ruso en Tampa Bay, Florida, antes de degollar un afroamericano con el que fumaba marihuana en Compton, California.

Entre los crímenes confirmados de Gibson, figura una condena del 20 de junio de 2000, de 7 años en la cárcel por violación sexual en Illinois y que cumplió en el Centro Juvenil de Illinois en Harrisburg.

El 26 de diciembre de 2007 fue detenido por violar y agredir a una víctima menor de 16 años en Tyrone, Pennsylvania, el 29 de mayo de 2008. Se declaró culpable de violación y no se registró como delincuente sexual, recibiendo una sentencia de cuatro años y medio de prisión.

El 17 de agosto de 2012 fue detenido en el condado de Cobb, Georgia, por no registrarse como delincuente sexual, por lo que se fugó.

Entre los supuestos asesinatos, afirmó haber usado el cuchillo con el que mató a Compton para asesinar a un desamparado en Cayo Hueso, Florida, el quinto asesinato.

Gibson dijo que le quitó la vida a su penúltima víctima, un turista, ahogándolo en la playa de Biscayne Bay, cerca de Miami Beach, en 2015.

Uno de los investigadores del Departamento de la policía de Miami Beach recordó un caso similar en febrero de ese año, cuando el cuerpo del ciudadano finlandés Essi Puhakka, de 27 años, fue encontrado en el área de un rompeolas.

La historia criminal de Gibson parece sugerir que estaba tras las rejas cuando se encontró el cadáver, ya que fue condenado a dos años de prisión en febrero de 2014 por no registrarse como delincuente sexual en el condado de Cobb, Georgia.

Luego de matar a Stocker, a quien le robó las tarjetas, usó una para comprar un boleto y viajar en autobús a de Nueva York, donde la utilizó nuevamente en una pizzería cerca del Rockefeller Center el 3 de mayo.

Dos días después, la policía lo vio bajar de un tren de la línea L, en el barrio de East Village en Manhattan, y lo detuvo después de una breve lucha, antes de acusarlo de resistirse al arresto y ser un fugitivo de otro estado.

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