Oscar Camps: Que nadie use la covid para obstaculizar el rescate de migrantes
Cristina Cabrejas
Roma, 30 ago (EFE).- Los dos barcos de Open Arms se encuentran en el Mediterráneo central con dispositivos capaces de detectar diagnósticos de enfermedades como la covid-19 para que nadie 'pueda usar la pandemia para crear alarmismo y obstaculizar el rescate de migrantes', explica a EFE el fundador de la ONG española, Oscar Camps.
'Open Arms vuelve al mar con todo su operativo porque esta es su función advertir a todas las organizaciones de lo que tendrían que hacer y estaremos aquí para recordárselo y no dejaremos de estar en el Mediterráneo siempre que tengamos la ocasión y las naves a punto', afirma Camps desde el velero Astral.
El Astra -que junto al Open Arms forma la flota de la ONU-, ya ha asistido llevando víveres al barco Louise Michel, financiado por el artista Banksy, y que se encontró en dificultades tras rescatar a 219 migrantes.
Ahora a la frontera más mortífera del mundo está llegando el Open Arms, que permanecía desde el pasado febrero en el varadero de Burriana, donde ha sufrido una profunda y minuciosa remodelación y que ha sido dotado de dispositivos para detectar el coronavirus y lleva a bordo miembros de la organización sanitaria italiana Emergency.
'Ademas de realizar las varias PCR que prueban que eres negativo, una vez a bordo tenemos unos protocolos diarios para mantener el virus a raya. No usamos vasos, si no botellas individuales y llevamos equipos de autoprotección con gafas, mascarillas y guantes para usar en el momento en el que entremos en contacto con los rescatados o con la tripulación de otro barcos', señala Camps.
Agrega que el Open Arms está capacitado para hacer pruebas medicas de VIH, de tuberculosis y de coronavirus.
'Tendremos así información clara para que no se use la pandemia, ni ningún tipo de patología para crear alarmismo e ir contra el rescate de los naufragios en medio del mar', destaca.
En Italia, partidos como la Liga de Matteo Salvini y Hermanos de Italia denuncian en sus mítines y redes sociales 'el peligro de que los migrantes puedan difundir el coronavirus en el país.
Según los datos oficiales, sólo el 3 por ciento de los migrantes llegados a las costas italianas ha resultado positivo.
Actualmente en el Mediterráneo central, el barco humanitario Sea Watch 4, operado por la ONG homónima y Médicos sin Fronteras, se hizo cargo de 150 migrantes rescatados por la nave Loise Michel que se encontraba en dificultad y ahora espera un puerto con 350 personas.
Además, el buque comercial Maersk Etienne espera desde el pasado 5 de agosto frente a la isla de Malta con las 27 personas que rescató cuando viajaban en un bote a la deriva, pero las autoridades maltesas no autorizan el desembarco.
Para Camps, la situación del mercante es 'un aviso a las navieras' de que si realizan un rescate van a tener que esperar días y días antes de atracar con el perjuicio que esto conlleva'.
Advierte de que debido a ello, 'se ha conseguido que incluso cuando los barcos llegan a la zona apagan su localizadores porque hay un vació de barcos en esta zona que es injustificado'.
'Y no solo con los mercantes, a las ONG se las inspeccionan con severidad buscando cualquier falta administrativa para evitar su salida al mar. Todos son dificultades y todo es persecución. Esto es lo que hacen los Estados como Malta e Italia para evitar que denunciemos lo que esta ocurriendo, que se silencie las llegadas, que no sea noticia, que no se cuenten los muertos y que nada sea fácil', denunció.
Sobre qué espera que suceda cuando el Open Arms realice su próximo rescate, Camps es categórico: 'Estamos convencidos que vamos a ser severamente inspeccionados, que nos van a impedir desembarcar y que nada va a ser sencillo'. EFE