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Las rarezas del río Brujuelas

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Las rarezas del río Brujuelas
SANTO DOMINGO. El río Brujuelas es una fuente acuífera poco conocida, pese a que posee características inigualables que lo hacen digno de admiración y de estudio. Según el especialista en medio ambiente, Eleuterio Martínez, es el único en República Dominicana que nace y muere en una llanura.

De acuerdo con Martínez, este río emerge en la Sabana de Guabatico en el paraje Brujuelas, a unos 10 kilómetros al Este de Bayaguana, en la provincia Monte Planta. En ciertas fuentes consultadas se confunde con el arroyo Brazo de Brujuelas, que nace más arriba, y que se une sus aguas con las del río Brujuelas en el poblado llamado La Horqueta.

Desde su nacimiento -en el poblado de Brujuelas hasta su desembocadura en la bahía de Andrés en Boca Chica- el afluente tiene un recorrido de 40 kilómetros en "forma de serpiente", describe y detalla Martínez en su columna Consultorio Ecológico del pasado 10 de noviembre.

En su nacimiento, el río es utilizado por la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) para alimentar el sistema Brujuela-Casuí, fuente del acueducto del municipio de Boca Chica y de otros poblados de la zona Este. Según el encargado de Relaciones Públicas de la CAASD, Valentín Sánchez, del campo de pozos Brujuela-Casuí se toman 15 millones de galones por día.

A pesar de esta extracción, en su trayecto el Brujuelas alimenta un conjunto de lagunas, siendo las más importantes por su tamaño, Los Anones y Los Charcos. Precisamente en Los Charcos, un sistema de lagunas formadas por rocas kárticas ubicado próximo a la carretera Mella, es donde el Brujuelas se vuelve más interesante y adquiere ese matiz de ensueño, que tanto emociona a los estudiosos de la naturaleza. Es allí donde se sumerge en el subsuelo y desaparece de la superficie para finalmente verter sus aguas en el mar Caribe, después de un recorrido de siete kilómetros por las entrañas de la tierra. En su ruta hacia el mar, la única pista que deja es el cordón de bosque que se forma a ambos lados de su curso, una visión que sólo es perceptible en toda su dimensión desde el aire.

Martínez describe con emoción que desde arriba "su curso se ve como un cordón mullido o un cinturón de árboles siempre verdes que conforman su bosque de galería". Otro dato interesante que resalta del Brujuelas es su cualidad "parte agua", porque es la única fuente acuífera que divide a las aguas de los ríos Ozama e Higüamo.

Daños

Como otros ríos del país, el Brujuelas también ha visto reducir su caudal en los últimos año, como consecuencia de las agresiones medioambientales. Mediciones hechas por el Instituto Dominicano de Recursos Hidráulicos (Indrhi) entre 1984 y 1988 establecieron que el caudal anual era de 2.0 metros cúbicos por segundo, pero para 1999 la cifra descendió a 1.38 metros cúbicos por segundo.

El río tampoco se ha librado de las agresiones humanas. En 2008, los comerciantes de Andrés, Boca Chica (lugar donde desemboca) cegaron varias de sus "venas" con la construcción de pozos filtrantes para baños y letrinas.