Compartir
Secciones
Podcasts
Última Hora
Encuestas
Servicios
Plaza Libre
Efemérides
Cumpleaños
RSS
Horóscopos
Crucigrama
Herramientas
Más
Contáctanos
Sobre Diario Libre
Aviso Legal
Versión Impresa
versión impresa
Redes Sociales
Equidad de género
Equidad de género

“Las candidatas deben hablar de todo, no solo de mujeres”

Especialista en comunicación política, la brasileña Luciana Panke habla para Diario Libre sobre los retos de las mujeres en el ruedo de las campañas electorales

Hacía las investigaciones de su proyecto de tesis doctoral en México, cuando algunos hallazgos le empezaron a inquietar: las presiones de género y el parentesco en los perfiles de campaña de las mujeres candidatas que eran objeto de su estudio, entre ellas la brasileña Dilma Rousseff y la argentina Cristina Fernández.

Con angustia por los hallazgos que encontraba, tales como juicios de valores, amenazas y cobranzas sociales que no se manifestaban en los hombres, Luciana Panke, una comunicadora y catedrática universitaria de Brasil, optó por ampliar su estudio y presentarlo en el libro “Campañas electorales para mujeres”.

El libro recoge las historias de 100 entrevistadas y entrevistados en 15 países de Latinoamérica, que incluyen tanto a mujeres políticas como consultores políticos.

Su idea fue entender “si existe una campaña que sea para mujer, qué deben decir esas mujeres y cuáles son los retos que tienen que enfrentar”, cuenta.

Hoy, con el libro en manos, mientras conversa con Diario Libre, Panke admite que no existe una fórmula que dicte la mejor manera de llevar una campaña política, pero sí tiene claro que las candidatas deben hablar de todos los temas, no solo de mujeres.

Panke entiende que, en una sociedad donde todavía a las candidatas se les juzga por la ropa en vez de por su capacidad, por el hecho de ser madre o de no serlo, por ser casada o soltera, y donde muchos insisten en el discurso de que la política no les pertenece, la mujer tiene que afanarse en demostrar su capacidad.

—¿Cuáles son esos retos que tiene que enfrentar una candidata?

El primero es la familia, que no la apoya, no solo la pareja... Se tiene una idea de que la política es mala, que es corrupción y que una persona se va dislocar, la familia no se quiere exponer. Esa actitud quizás se asume con los hombres, pero para las mujeres es muy duro, pues, se le hace pensar que van a descuidar cosas que “le son propias” dentro de la casa.

Otro reto son los partidos políticos. Las mujeres están para cumplir porcentajes, pueden ir a las reuniones, ser parte de los comités de base, pero en la foto sale el varón, en las mesas de decisión está el varón y si está la mujer no tiene decisión. En los partidos, una candidatura de mujer es vista como una obligación legal solamente para cumplir la cuota, pero no la apoyan con los presupuestos.

Otras veces se ponen mujeres de familias o esposos políticos, como por ejemplo Cristina (Fernández) en Argentina, que basó su campaña en que era la fuerza de él y todo su marketing era él (el esposo, Néstor Kirchner) y la viuda que seguía el trabajo del hombre, era una sumisión que, tal vez fue estratégico y no es malo lo de la familia, pero... es estrategia. Pero aun cuando sean capaces, las mujeres tienen que esforzarse cada día en demostrar que es capaz, sobre todo si es joven, bonita o hija de políticos.

El siguiente reto se manifiesta en las calles, muchos dicen que tienen en la mujer una persona que le representa pues trabaja mucho, pero otros dicen que les encantan sus ideas, pero no pueden votarla porque la política no es de mujeres.

Nuestra sociedad todavía mira a mujeres y hombres en espacios predeterminados y una mujer líder es llamada mandona, estresada, histérica, bruta, pero el hombre es alguien fuerte, líder. Son estereotipos muy duros.

Todavía elegida, la mujer tiene el reto de que le respeten sus habilidades, tanto femeninas como de administración. Hay que aprender a respetar a las mujeres como líderes.

¿Cómo debe la candidata dirigir su discurso?

Como candidata la mujer tiene que ser estratégica siempre, ver qué se está planteando, hablar de todos los temas. Puede tener la cuestión de la mujer como una causa, pues el hecho de ser mujer se ve en su cuerpo, pero su discurso debe ser estratégico, no verse como enemiga de los varones, pues no es una cuestión de guerra de sexo. Es decir que tenemos capacidad, que tenemos ideas distintas de las problemáticas y tener esa diplomacia de decir las cosas, pero es fundamental tener una estrategia que va a depender de la personalidad, pues no hay una fórmula para todas las candidatas.

¿Qué le dice a una candidata que pide el voto por el hecho de ser mujer?

Decir vótenme por ser mujer es una estrategia que es adecuada para algunas mujeres y no para otras. Habrá mujeres que se van a sentir representadas, pues sabe que esa se preocupa por cosas que los hombres ni piensan, como la maternidad, por ejemplo. Pero no es siempre que se debe decir. En la campaña no hay una fórmula mágica.

Y, ¿no se corre riesgo de reproducir estereotipos?

A veces reproducir el estereotipo es positivo, pues hay mujeres que no tienen ese lado tan despierto y algunas se pueden identificar. Ahora, nosotras debemos decir, enseñar que no solo hablamos sobre mujeres, que hablamos de todo. La mujer tiene que, en su imagen pública, hablar de varios temas, aunque sea feminista y el tema sea mujer, pero hay que dejar muy en claro que habla de todo y tiene una capacidad laboral, administrativa, diplomática, política independiente de defender o no la visión de género.

¿Cuáles son los estereotipos más presentes en las campañas y cómo han afectado a las candidatas?

Que los hombres son los héroes, salvadores de la patria, están muy relacionados con la masculinidad y a las mujeres se les percibe con las imágenes de madre, la guerrera y la profesional. En las campañas se hace una mezcla de esas imágenes todo el tiempo. En la mujer está la idea de la madre que está preocupada, la sensible; la guerrera es la que está en defensa de la familia, que tiene la valentía de defender y la profesional es la que dice que está preparada y pone énfasis en su capacidad laboral y formación profesional. Entonces, en una campaña se deben mezclar esas tres imágenes públicas de acuerdo con la personalidad de cada mujer.

TEMAS -

Es periodista en Diario Libre.