Reclama crímenes ligados a procesos electorales no queden impunes

Mucho pesar ha causado entre sus amigos familiares y la comunidad de Simón Bolívar la muerte a tiros del dirigente perremeísta Julio César Pérez el pasado domingo, cuyos restos fueron enterrados hoy en el cementerio Cristo Redentor.

El encargado de prensa del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Andrés (Licho) Matos, criticó durante el entierro de Pérez que los crímenes ligados a procesos electorales queden impunes y pidió a sus amigos y familiares que no descansen hasta lograr justicia.

“Les pido a sus familiares y a sus amigos que no descansen, porque Julio, que durante más de 30 años sembró por ver un país mejor, ahora su sacrificio debe ser para lograr detener que en cada proceso electoral alguien pueda matar a otro y no caiga preso”, expuso.

Licho Matos se quejó de que siempre los crímenes electorales queden impunes y no se castiguen a los responsables.

Instó a los familiares a encabezar ese reclamo y dijo esperar que la muerte Julio César sea una contribución para los crímenes durante los procesos electorales no vuelvan a ocurrir.

De su lado, Mario Antigua Pérez, hermano de Julio César Pérez, hizo un llamado al presidente electo, Luis Abinader, para que la muerte del dirigente no se quede impune.

“Esta muerte fue en defensa del pueblo, para un cambio que queremos todos los dominicanos”, manifestó.

Familiares y amigos del fallecido clamaron y exigieron justicia para quien dijeron “no mataba ni una mosca”, mientras sus hijos le agradecieron a su padre muerto por nunca haberles dado la espalda.

“La justicia divina vendrá sola, ahora queremos la terrenal, que es la exigimos todos sus hijos, sus amigos, sus compañeros, la comunidad que tanto lo quiere, y estamos dispuestos a todo por mi papá, porque fue una gran persona, un buen compañero, buen amigo, un buen padre”, dijo Bernardo Pérez Jiménez, hijo del fallecido.

Allegados de Julio César, presentes en el sepelio, acusaron por su muerte al administrador del Hospital Moscoso Puello, Gerpi Polanco, a quien denuncian por supuestamente hacer negociaciones y compras de votos en todos los procesos electorales.

También lo acusan de haber orquestado un plan para incidentar el proceso electoral en el Politécnico Nuestra Señora del Carmen, donde el fallecido fungía como supervisor.

Ámbar Castillo