Sepultaron ayer restos de niño que desapareció misteriosamente de su casa de San Luis
El cuerpo fue hallado el jueves en estado de descomposición
Adalberto de la Rosa
Fueron sepultados ayer en el cementerio Cristo Salvador los restos del niño Rafael Castro Terrero, de cuatro años, quien fue encontrado en estado de descomposición, cerca de donde vivía en San Luis, luego de haber desaparecido de su vivienda hacía tres días.
El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) le realizó la autopsia correspondiente a este tipo de caso y entregó el cadáver a los familiares después del mediodía del sábado. El cuerpo fue sepultado casi al mediodía de ayer domingo 4 de febrero.
La misteriosa desaparición del menor es investigada por agentes de la Dirección Central de Investigación (Dicrim), quienes han hecho levantamientos de información en el lugar donde el cuerpo del menor fue encontrado y en su residencia del barrio La Piña, de San Luis.
Se informó que al menos tres personas habían sido detenidas para fines de investigación, pero de acuerdo con el presidente de la Junta de Vecinos, Miguel Piña, fueron puestas en libertad. Diario Libre buscó información del caso ayer en la Policía, pero no fue posible obtenerla.
Rafael, el niño de cuatro años que desapareció de su casa y apareció muerto tres días después
Pablo Castro y Yanelsi Vianneris Terrero son los padres del menor, cuyo cuerpo fue hallado en un solar baldío próximo a la casa donde vivía. De acuerdo con el padre del niño, su cuerpo presenta signos de violencia.
La desaparición
La noche del pasado domingo fue que desapareció el niño de su casa mientras cenaba. Su madre había dejado al menor y otros hijos con su padre y salió a comprar un medicamento para un hermanito que tenía fiebre y al regresar, supuestamente preguntó a su esposo por el menor, porque no le había echado de menos.
Narra la madre Yanelsi Vianneris Terrero que al llegar encontró la puerta de la vivienda abierta y al preguntarle a su esposo por el hijo dijo que creía que estaba en la sala, mientras él estaba en la habitación.
De acuerdo con los padres del niño, ningún vecino vio personas extrañas en los alrededores de la vivienda ni se escuchó llanto, por lo que consideran el caso extraño, aunque tienen la idea de que quienes cometieron el hecho serían personas cercanas.
Lo extraño del caso es que el menor desapareció misteriosamente el domingo, como a las 8:00 de la noche, y desde entonces se buscaba y fue el jueves cuando las autoridades policiales hallaron el cadáver en un solar baldío, precisamente próximo a la casa donde vivía.
Adalberto de la RosaLicenciado en Comunicación Social por la universidad O&M. Ha ejercido el periodismo desde 1988 en radio, televisión y periódicos.
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