Argentina le amarga el sueño mundialista a República Dominicana

SANTO DOMINGO. República Dominicana tuvo un sueño mundialista, pero Argentina se encargó de convertirlo en pesadilla luego de ganar 87-70 (31-14/17-21/20-18/19-17) en la fase de cuartos de final del Campeonato Continental FIBAAmericas.

Con esa victoria el conjunto suramericano avanza a la ronda semifinal del torneo, pero a la vez también clasifica para el Mundial sub19 del próximo año, un boleto que se le escapó a República Dominicana.

Alanzo Frink encestó 27 puntos y Lester Quiñones agregó 26 por República Dominican. Una buena actuación, sino es que los 35 puntos de Marco Giordano martilló desde distintos ángulos la inestable defensa quisqueyana. Juan Ignacio Marcos 14 y Juan De La Fuente 13 se unieron a Giordano en el ataque.

Fue en el 2015 la última vez que Dominicana se ganó un puesto mundial en esa categoría, su segunda vez; la primera fue en 1983.

Carlos Carela marcaba un triple en pase de Rafael Rubel con el que ponía el partido por debajo de los dos dígitos con 1:09 por jugar (35-43) del segundo cuarto.

La embestida dominicana duró poco, pues un triple de Juan Ignacio Marcos y luego un doble de Marco Giordano, con un balón perdido de por medio en mal pase de Rubel, devolvió a Argentina el liderato sobre los 10 puntos al cerrar la primera mitad 48-35. Visto de otra forma, Dominicana se quedó sin marcar en el último 1:09.

Quiñones comenzaba bien el cuarto final por Dominicana con un triple, en una jugada no programada. Quiñones siguió con otro para bajar de 10 a Dominicana (59-68) con 9:17 por jugar, una reacción que resultó efímera, pues otra vez Argentina congelaba la aspiración de la tricolor.

Buen personal

El talento de este grupo (Alanzo Frink/Matthew Herasme/Carlos Carela/Julio Pascual/David Jones/Elian Torres/Rafael Rubel/Lester Quiñones/Antonio Bonilla Jr/Richard Nuñez/Steven Verplancken/Joel Soriano) dirigido por Víctor Hansen es incuestionable.

Cualquiera de los 12 tiene el nivel para jugar en esta categoría. Pero la falta de espíritu competitivo, el hambre del que anhela victoria, falta de ritmo en los dos lados de la cancha, sin liderazgo, se convirtieron en barreras infranqueables para la dirigencia técnica, la cual apostó por el necesario y valioso talento dominicanyork, pero los nucleó con retrasos.

Carlos Sánchez