Ramón Laureano ha sido la chispa de los Atléticos de Oakland

Nunca se sabe lo que el “Show de Ramón Laureano” tiene preparado para cada noche. Pero se ha hecho costumbre que sea algo emocionante.

El poder del dominicano ha sido la herramienta de la que ha hecho gala últimamente, dando jonrón por tercer juego consecutivo el lunes, ayudando a respaldar a su coterráneo Frankie Montás en la victoria 5-4 sobre los Azulejos, según relata Martín Gallegos en las páginas de MLB.com.

Con la derrota de los Reales, la actuación de Laureano sirvió para que los Atléticos despertaran con el mejor récord de la Liga Americana con 18-12; algo difícil de imaginar luego de comenzar la zafra con 0-6.

“Ha sido el chico que nos ha devuelto el ritmo”, dijo Montás sobre Laureano. “Los hizo [el domingo] y lo volvió a hacer ahora. Ha estado dando la cara por el equipo”.

Su sexto cuadrangular de la campaña -- uno de dos carreras ante el abridor de Toronto Steven Matz con el juego 3-3 en la quinta entrada -- salió del bate a 109.4 mph, según Statcast. Viajó una distancia proyectada de 432 pies, alcanzando un destino reservado para los principales cañoneros de la liga, por encima de la primera sección de las gradas del jardín izquierdo del Coliseum de Oakland, rebotando hacia una de las suites.

El término de “cinco herramientas” ha sido mencionado con frecuencia en los últimos días, como adaptación para describir el tipo de jugador al que ha evolucionado Laureano. El oriundo de Santo Domingo tiene ocho bases robadas; empatado en el liderato de MLB. También luce constantemente a la defensa, tanto con el guante como con su brazo.

Ahora, Laureano está demostrando su poder en una racha en la que ha dado cinco bambinazos en los últimos 11 encuentros. Y lo más importante, lo ha hecho en momentos cruciales para los Atléticos.

“Sale y responde en los momentos más importantes”, dijo el patrullero de Oakland Stephen Piscotty. “Juega a 100 millas por hora. Tiene un cañón de brazo. Nos ha estado liderando en los juegos recientes”.

Laureano sólo necesitó de 27 juegos para alcanzar seis jonrones este año, luego de que llegara a esa marca en el 54to encuentros de la campaña pasada. Pero el manager Bob Melvin siempre ha confiado en el poder de Laureano. El atributo que según Melvin ha llevado al dominicano a un nivel de “cinco herramientas” son las bases robadas. Es algo en lo que el patrullero de 26 años ha estado trabajando bien de cerca con el venezolano Elvis Andrus, hablando constantemente con el campocorto sobre cómo tener una mejor consciencia para saber cómo dar mejores saltos y estudiar a los lanzadores.

“Tiene un poder tremendo”, dijo Melvin. “El corrido de bases lo ha llevado a otro nivel. Probablemente es la última herramienta que lo ha llevado a donde está”.

Luego de irse de 4-2, el promedio del dominicano llegó a .243. Ese número tendrá que seguir aumentando para que pueda perfeccionar el aspecto del contacto en su arsenal de “cinco herramientas”. Su mejor cifra fue .288 en el 2019, pero no se sorprendan si lo supera. Está bateando .300 en sus últimos 10 compromisos.

“Lo próximo será tener un promedio consistente y acercarse a .300”, dijo Melvin.

AP

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