La magia de los Esquivadores

"Vuelve el perro arrepentido, con su mirada tan tierna, con el hocico partido y el rabo entre las piernas..." El Chavo del 8

En abril, el capataz de los Dodgers de Los Angeles, Don Mattingly, estuvo al borde de ser despedido, caminaba en el borde de una navaja.

La gran inversión de los Esquivadores en la temporada muerta estaba funcionando como un cacharrito que ni empujado encendía.

El slump de bateo en un jugador es como las rachas malas y buenas de un equipo, tienen el mismo árbol genealógico, y como entran salen.

El comienzo desastroso de los Esquivadores obligó por momento a Ned Coletti que apretara el botón del pánico, pues tenían 6 derrotas seguidas al 20 de abril, con récord de 7 ganados y 10 perdidos.

En mayo la situación no pintaba color de rosa, y perdieron 8 en línea, y en el mes de junio, cuando perdieron con los Padres de San Diego por 6-3 y 5-2, se pusieron con 13-21, ocupando el sótano de la División Oeste.

A partir del 22 de junio, llegó el despertar de los Dodgers, y en la pausa para del Juego de Estrellas, el equipo tenía registro de 47-47. El 19 de julio se reanudó la temporada y las derrotas eran esporádicas, las seguidillas negativas se escondían como las barracudas, mientras ganaban en casa y de visitante en forma extraordinaria, y a base de un fuego cruzado bajo el mando del "comandante" cubano Yasiel Puig y el "pimentoso" dominicano Hanley Ramírez asaltaron con éxito el primer lugar.

Ha tenido también mucho que ver la ofensiva de Adrián -El Titán- González, líder del equipo en bateo .296, jonrones 16, remolcadas 77 y anotadas 58. Y si aterrizamos en el pitcheo, este trío está blindado: Clayton Kershaw, 13-7; Zach Greinke, 12-3; Hyun-Jin Ryu, 12-4. El cuerpo de alfeñique, ahora es un Charles Atlas.

Hoy, los Dodgers disfrutan sin problemas del melao del Oeste con récord de 75 ganados y 52 perdidos, 28 ganados y 5 perdidos después del Juego de Estrellas y registro de 22 ganados de 25 en la ruta.

Nuestro país tiene el privilegio de contar con muchas Ligas de Béisbol que realizan a "mano pelá" un trabajo social-deportivo sin desperdicios, sobre todo donde el Estado no tiene programas de iniciación deportiva.

Uno de esos programas es la Academia Luisito Mercedes, que realiza una función social, donde cientos de padres dejan sus hijos los fines de semana y hacen del béisbol su principal pasión, por lo tanto deben recibir cierta ayuda para desarrollar sus planes.

Sin embargo, la Academia Luisito Mercedes está en los linderos del colapso, por lo que le solicitamos al gobierno de Danilo Medina que le tienda la mano poderosa del Estado para evitar que se asfixie.

Twitter: bienvenidorv

Bienvenido Rojas