El COVID-19 cambiará el mundo que conocemos en los eventos deportivos

El COVID-19 de alguna manera dejará su huella en el planeta y el mundo del deporte tendrá que protegerse ante el posible acecho de ese virus que a las 5:00 p.m. del lunes (hora dominicana) sumaba ya 74 mil 165 muertes.

En un escenario ideal, con la vacuna ya conseguida, en nada significa que el hasta ahora indetenible COVID-19 renuncie a estar al acecho, por lo que los espectáculos deportivos corren el riesgo de ser un foco o vía de exposición del coronavirus.

El doctor Clemente Terrero, especialista en infectología sostiene que “el mundo va a cambiar” y eso también toca al deporte.

Los eventos de las superligas de Estados Unidos (MLB/NFL/NBA/NHL/ML), así como el fútbol de Europa, juegos multidisciplinarios, como las Olimpíadas, mundiales, campeonatos continentales, Centroamericanos y del Caribe facilitan la aglomeración de personas. Eso, quizá, tendrá que revisarse. En el caso de unos Juegos Olímpicos, para poner un ejemplo, aún con la vacuna ya lograda, sería necesario que se presente una garantía de que atletas y asistentes hayan sido vacunados. Y aun así existen sospechas de contagio. “Será un requisito presentar esa vacuna en las competiciones” señala el infectólogo, porque se puede dar el caso de que el atleta “puede llevar el virus en la garganta –y así- infectar a otro o infectarse de otro”.

Bajo ese panorama quedan interrogantes por resolver, “porque no sabemos si la vacuna va a eliminar el estado de portador”, señala Terrero, “porque la vacuna puede eliminar que tú sufras la enfermedad, pero no el estado de portador. Puedes tener el virus en la garganta después de haberte vacunado”.

En algunos deportes, en especial los de combate (boxeo, karate, judo, lucha, taekwondo), la proximidad entre los atletas es inevitable. Igual pasa en baloncesto, fútbol, balonmano, entre otros deportes.

El virus carece de un tiempo definido, “entonces eso significará que después que inmediatamente pase la pandemia el virus se va a quedar en la comunidad y va a seguir produciendo casos”.

Todo lo que va a tener que ver con cualquier actividad de masas, dice el facultativo, llámese deportiva, reuniones, concentraciones, marchas, actividades religiosas, docencia, en fin, “todo, no sabemos cómo lo vamos a enfrentar a futuro”.

Caso Juegos Olímpicos

Las Olimpíadas de Tokio, movidas para 2021 (julio 23/agosto 8) tendrán otro reto, aun con una posible vacuna, que varios países se atribuyen ya está cerca (Brasil, Estados Unidos, entre otros).

“No sabemos si tengamos capacidad para vacunar a toda la gente que va a ir o -si- todo el mundo esté vacunado”, dice Terrero, egresado de la UASD, que trabaja en el Centro de Gineco-Obstetricia y en el Robert Reid Cabral.

Una foto publicada por Baseball Authority en su cuenta de Twitter @BsblAuthority evidencia que en Grandes Ligas los peloteros se colocaban una mascarilla por la pandemia de la Gripe Española de 1918. Para unas Olimpíadas el cuidado sería mayor.

Se esperan 11 mil atletas en Tokio y para febrero ya se habían vendido más de tres millones de “tickets”. Sostiene que “no es solo vacunar a los atletas, sino la gente que va. Es gente que va a tener riesgo”.

Terrero, egresado de la UASD y con una especialidad en infectología realizada en el Robert Reid Cabral entiende que habrá un riesgo para cada persona que no haya sufrido la infección. “Porque tampoco sabemos qué tiempo va a durar la inmunidad que el virus produce. Si dura para toda la vida se salvaron todos los que han sufrido la infección y se han curado, ahora todos los demás van a tener un riesgo de exposición y de sufrir una infección”. Ese horizonte luce oscuro en este instante, pero algunos profesionales de la salud entienden que el mundo del deporte va a cambiar

Carlos Sánchez G.

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Amante del deporte en todas sus dimensiones. Confiado en que la base del deporte debe de ser desde la escuela. Ha cubierto Juegos Panamericanos y Juegos Centroamericanos y del Caribe.