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Sensación de desamparo

La percepción es que las consecuencias del coronavirus están afectando al mundo entero

En una columna anterior hicimos referencia al papel que el temor natural a lo desconocido está desempeñando en las reacciones de pánico colectivo ante el coronavirus. Pero en adición a ese temor, otro factor está también contribuyendo al clima de alarma que hoy existe.

Todos los lugares del mundo están expuestos a algún tipo de amenaza procedente de la naturaleza. Puede que sea un huracán, un terremoto, una inundación, un deslizamiento de tierra, un volcán o cualquier otro desastre. El grado de exposición a un riesgo específico varía de una a otra localidad, pero por lo regular la incidencia de una calamidad no afecta a todas las zonas al mismo tiempo. Es común que sólo una región sufra los embates del fenómeno, y que las que no los sufrieron puedan acudir en ayuda de ella. Más aún, aunque los efectos puedan afectar a un país completo, como podría ser el caso de la República Dominicana y los huracanes, otros países no serán golpeados simultáneamente, lo que significa que el país afectado podrá recibir ayudas externas a fin de reparar los daños y recobrar su normalidad.

Algo que hace al coronavirus tan inquietante, por lo tanto, es la percepción de que sus consecuencias están afectando al mundo entero. Como cada país tiene como prioridad absoluta hacer frente a su propia crisis, no se puede contar con que la ayuda externa llegará a tiempo o si es que realmente llegará. En países pobres y pequeños como el nuestro, esa situación crea una virtual sensación de desamparo.

La validez de esa sensación se confirma por las medidas unilaterales que los países han tomado para protegerse. Como ejemplo está la prohibición de la entrada a los EE.UU. a extranjeros procedentes de Europa. El gobierno estadounidense ni siquiera informó a los europeos de esa decisión, y cuando se le cuestionó al respecto respondió que la Unión Europea tampoco informaba previamente a los EE.UU. cuando iba a establecer un nuevo impuesto de importación.

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Doctor en Economía de Columbia University especializado en empresas, mercados, pronósticos y riesgo.