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Choque de precios

La economía japonesa ha sido comparada a un otrora poderoso vehículo de motor que se ha quedado sin gasolina

El nombre, “umaibo”, no significa nada para nosotros, pero para un japonés es una palabra que despierta gratos recuerdos. De hecho, bastante más que recuerdos, pues se trata de un bocadillo que sigue siendo muy popular en Japón. Elaborado en base a maíz, tiene la peculiaridad de que se ofrece en diversos sabores, desde queso y ensalada, hasta caramelo y chocolate. Pero su peculiaridad de mayor interés económico es que desde su creación, hace 44 años, se vendió al mismo precio de 10 yenes la unidad, hasta el año pasado cuando el precio fue aumentado en un 20%.

Si algo así hubiera ocurrido aquí, nos habría molestado pero no sorprendido, ya que estamos acostumbrados a que los precios suban. En Japón, por el contrario, el incremento fue un choque de grandes proporciones, que obligó a los ejecutivos de la empresa distribuidora a presentar detalladas explicaciones públicas acerca de las causas del aumento, además de expresar, siguiendo sus tradicionales hábitos culturales, su gran pesar por haber tenido que tomar esa decisión.

Las alzas de precios no se han limitado al “umaibo”. Se han difundido por toda la economía como resultado del aumento en el costo de la energía, los combustibles y los alimentos. Esencialmente, es una inflación importada, provocada por la guerra de Ucrania, restricciones de suministro y otros eventos externos.

Aquejada desde hace años por un largo período de persistente estancamiento, salpicado por recurrentes episodios de deflación, la economía japonesa ha sido comparada a un otrora poderoso vehículo de motor que se ha quedado sin gasolina. Sus vecinos han ido ganando terreno respecto de ella, desplazándola como factor dinámico en el ámbito mundial. Para intentar salir de esa situación. el banco central ha aplicado tasas de interés negativas y no las ha subido a pesar de la inflación. Como consecuencia, el valor del yen ha descendido respecto del dólar y otras monedas, lo cual a su vez agrava la inflación al hacer subir el precio de las importaciones.



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Doctor en Economía de Columbia University especializado en empresas, mercados, pronósticos y riesgo.