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Doble conexión

Evidentemente, aunque Trump sea nominado por su partido, eso no significa que vaya a ganar en los comicios

La fortaleza con la que Donald Trump se encamina hacia las elecciones primarias de su partido, está siendo tomada en cuenta por los gobernantes latinoamericanos.

Luego de la elección del actual presidente Biden en el 2020, el escenario político parecía destinado a una repetición de lo ocurrido en ocasiones en las que el presidente y candidato no ha logrado el triunfo para un segundo período. Dada la percepción de que el presidente en ejercicio disfruta de una ventaja derivada de la visibilidad por el desempeño de sus funciones, no conseguir la victoria para un segundo período es considerado en los EE.UU. como una señal de rechazo popular a sus actuaciones como presidente. Tal como sucedió con Bush padre, dicha derrota puede implicar que el presidente no vuelva a postularse más adelante, aun teniendo el derecho de hacerlo ya que los dos períodos de cuatro años que puede ejercer no tienen que ser consecutivos. Esto así pues durante los cuatro años en que su partido estará en la oposición, surgirán nuevos dirigentes que serán los candidatos en las siguientes elecciones.

De ahí la importancia política para Trump de no haber reconocido su derrota, atribuyéndola en cambio a maniobras fraudulentas llevadas a cabo en su contra, lo que ante sus partidarios le exime del estigma asociado con ser un presidente de un solo período.

Evidentemente, aunque Trump sea nominado por su partido, eso no significa que vaya a ganar en los comicios. No obstante, a pesar de que no tiene asegurado el triunfo, países como el nuestro tendrán que navegar con cautela, manteniendo sus vínculos con la presente administración demócrata, sin descuidar acercamientos informales con Trump y los republicanos. Estos últimos incluyen a los que apoyan a Trump y a los que le rechazan.

Esa doble conexión es especialmente relevante para el presidente Abinader, quien aspira a un segundo período y, de ser reelecto, estará comenzando su nuevo mandato cuando se celebren las elecciones estadounidenses en noviembre del 2024.

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Doctor en Economía de Columbia University especializado en empresas, mercados, pronósticos y riesgo.