Toyota lanza compañero robótico en Japón

Kirobo Mini, el dispositivo parlante, supuestamente tiene la inteligencia de un niño de cinco de años de edad.

En un esfuerzo por atraer a consumidores fuera del mercado automotriz, Toyota se ha lanzado al sector de robots para uso doméstico.

Dicen que el robot parlante de 10 centímetros llamado Kirobo Mini, que se venderá en Japón el próximo año por ¥39,800 (US$392), tiene la inteligencia de un niño de cinco años y que puede aprender frases y reconocer expresiones faciales con una cámara integrada y otros sensores.

La nueva iniciativa ha surgido conforme el mayor fabricante automotriz de Japón ha comenzado a invertir en el sector de inteligencia artificial y ha contratado a expertos en tecnología robótica de otras compañías internacionales para luchar contra la invasión de Google, Apple y otras compañías tecnológicas en la industria automotriz.

En Japón, Toyota está intentando seguir adelante en un mercado cada vez más reducido debido a una población que está declinando, conductores que están envejeciendo y potenciales consumidores jóvenes que han mostrado poco o ningún interés en ser dueños de un vehículo.

“Este producto podría ayudar a los consumidores a interesarse en la compañía o ayudarnos a conectarnos con nuestros clientes que han dejado de comprar vehículos Toyota”, dijo Fuminori Kataoka, director general del proyecto Kirobo.

Ésta no es la primera vez que el fabricante de automóviles ha incursionado en sectores no automotrices. Además de vehículos, Toyota también fabrica casas y productos marinos y hasta vende hierba que según la compañía puede crecer en climas severos.

La compañía comenzó a realizar investigaciones en robótica en 2000 y ya había experimentado con un robot que tocaba la trompeta. Pero sus esfuerzos recientes se han enfocado en desarrollar robots para ayudar a las víctimas de embolias y otras enfermedades debilitantes a recobrar su balance y control muscular.

Toyota se asociará con Vaio, la empresa de computadoras portátiles que se separó de Sony, para fabricar su primer robot producido en masa. La fábrica de Vaio, que se encuentra en la prefectura de Nagano, es el sitio en el que se fabricó Aibo, el perro robótico de Sony.

Kirobo Mini, que cabe en la palma de la mano y tiene ojos grandes y zapatos rojos, es suficientemente pequeño para cargarse a todos lados. Cuando el usuario lo lleva en el automóvil, el robot lo alienta a conducir bien con frases como “Oops” cuando el conductor frena repentinamente o “No me dejes”, cuando se queda en el vehículo.

Sin embargo, el Sr. Kataoka dice que Kirobo no tiene un nivel de comprensión que se podría definir como inteligencia artificial y que su función es conectarse emocionalmente con sus usuarios.

Japón ya tiene varios compañeros robóticos incluyendo Pepper de Softbank y Palro de Fujisoft, un humanoide compacto que canta y baila. Pero la demanda se ha limitado a entusiastas de robots y residencias para mayores.

Toyota sigue sin saber si hay un mercado en el extranjero para un compañero robótico que no desempeña una función práctica, por lo que aún no ha fijado una fecha para el lanzamiento comercial de Kirobo fuera de Japón.

Por Kana Inagaki (c) 2016 The Financial Times Ltd. All rights reserved

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