Las remesas, responsables directa de la caída de la pobreza en República Dominicana

La reducción de la pobreza que en los últimos años registró la República Dominicana se debió principalmente a las remesas y no a las políticas o subsidios sociales que entrega el Estado dominicano para lograr ese objetivo, señaló el economista Miguel Ceara Hatton, consultado sobre el estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

En el país, la tasa de pobreza monetaria nacional se redujo desde 41.2% en 2009 hasta 22.8% en 2018. En tanto, la pobreza extrema cayó desde 11.2% a 2.9% durante el mismo período, según reflejan las cifras oficiales.

Las remesas juegan un papel importante en la caída de los niveles de pobreza. La tasa de pobreza de la población que recibe envíos de dinero desde el exterior es un 33.3%, pero si esos hogares no recibieran las divisas la cifra se dispararía hasta el 60.8%.

Asimismo, en caso de que el país no recibiera remesas, la tasa de pobreza general, que en 2017 era de un 25%, se hubiese ubicado ese año en un 27.2% de la población total, de acuerdo al estudio Panorama Social América Latina 2019, elaborado por la Cepal.

“En dos de los cinco países donde la pobreza se redujo fuertemente (República Dominicana y El Salvador), el aumento de los ingresos por transferencias se debió en su totalidad al incremento de las remesas”, refiere el estudio de la Cepal.

El estudio de la Cepal demuestra la ineficacia de la política social que ejecuta el Estado, a juicio del economista Miguel Ceara Hatton.

“El hecho de que sin remesas la tasa de pobreza subiría a un 60% prácticamente lo que nos está diciendo es que la fuente principal de reducción de la pobreza han sido las remesas, no la política social, por lo menos, en las cifras de 2017”, declaró Ceara Hatton.

“En dos de los cinco países donde la pobreza se redujo fuertemente (República Dominicana y El Salvador), el aumento de los ingresos por transferencias se debió en su totalidad al incremento de las remesas”, refiere el estudio de la Cepal.

Cerca del 9% de los hogares dominicanos asegura haber recibido remesas, enviadas por los 1,558,668 criollos que residen en el exterior, destaca el informe.

Entre enero y noviembre de 2019 el país recibió US$6,421.1 millones en remesas (RD$337,693.2 millones a una tasa de cambio de RD$52 por dólar). Los dominicanos que reciben dinero desde el extranjero, en promedio, perciben un monto de US$217.8 (RD$11,325.6).

Los subsidios sociales que otorga el Estado dominicano, y con los cuales se busca reducir la pobreza, no han logrado su cometido producto de la situación de clientelismo que acompaña esa política, indicó el economista.

“Los montos son muy pequeños (de los subsidios) y no están produciendo los efectos que se habían considerado inicialmente sobre la base de la condicionalidad. Lo que hace es condenar a la gente a depender de un ingreso que es muy reducido y no le permite salir de la pobreza y eso lo está evidenciando el estudio”, aseguró.

En tanto, Rafael Espinal, coordinador de la carrera de Economía del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec), explicó que aunque las remesas históricamente han significado un aporte importante a la canasta familiar de quienes carecen de ingresos fijos, eso no significa que las políticas económicas que han implementado los gobiernos a sectores de menores ingresos no hayan tenido impacto.

En el país, al pasado octubre, 2,578,065 personas reciben algún tipo de asistencia social, según la Administradora de Subsidios Sociales (ADESS).

“Las remesas aportan al producto interno bruto (PIB) entre un 7% y un 8% del total del PIB. Hacen un aporte importante. Van directamente a las familias dominicanas, sobre todo, a las más pobres. Evidentemente, es incomparable (los subsidios) con tema de las remesas”, señaló Espinal.

“En dos de los cinco países donde la pobreza se redujo fuertemente (República Dominicana y El Salvador), el aumento de los ingresos por transferencias se debió en su totalidad al incremento de las remesas”, refiere el estudio de la Cepal.

Pablo García

Licenciado en Comunicación Social, mención Periodismo por la UASD. Desde el año 2012 ha trabajado en varios medios impresos.