Mascarilla de lechosa, para la belleza de la piel y el cabello
Una misma combinación que te la puedes comer, beber y aprovechar para el cabello y la piel.
La lechosa es una de las tantas frutas deliciosas a la que le podemos sacar partido por donde quiera que se mire. Si nos la comemos sola aprovechamos la cantidad de vitaminas y nutrientes entre ellos la vitamina A, que trabaja en favor de la piel y el sistema inmunológico, al igual que la C. Compuestos como el licopeno que además de darle su bonito color es un potente antioxidante que en conjunto con la criptoxantina enfrenta a los radicales libres, que son los responsables del envejecimiento prematuro de las células.
Incluirla a la dieta diarias es fortalecer la salud del intestino, ya que por la cantidad de fibra que aporta es un laxante natural que limpia el tránsito intestinal, evitando así el cáncer de colon y los brotes en la piel fruto del estreñimiento.
La papaína, componente por el que quizá también se le conozca como papaya, ayuda a la cicatrización... en pocas palabras la lechosa es una aliada del bienestar. Y como no todo es comer, la podemos untar en cabello y piel para potenciar sus beneficios en estas dos áreas tan importantes para la autoestima, ya que mejora su apariencia significativamente; en la piel sirve de aclarante e hidratante; mientras que a tu melena le dará la suavidad, brillo y nutrición deseado, mientras que restaura los daños sin dejar un olor desagradable ni complejidad al retirar los residuos.
¿Cómo hacer la mascarilla?
Necesitarás:
Miel de abeja
Unos cuadritos de lechosa
Preparación
Así de sencillo como se lee, lo cual pareciera como una ensalada frutal para el desayuno o la merienda, pero para estos fines harás un puré de lechosa y miel, aplicas por 15 minutos, enjuagas y listo. A disfrutar de los beneficios.