“Doctora: nos vemos en enero”

Las resoluciones de nuevo año parecen tener buenas intenciones. Se proponen una serie de metas, se planifican estrategias para desarrollarlas y el seguimiento permite materializar ese objetivo inicial. Cuando de control de peso corporal se trata, es frecuente encontrar este impulso inicial, pero no una estrategia para conseguirlo ni la continuidad para alcanzar la meta propuesta. Para sostener esta iniciativa, estimular el cambio de hábitos y la educación nutricional son parte de una estrategia propuesta.

¿Existen algunas recomendaciones especiales para Navidad o algún período festivo?

Realmente no. Las pautas sobre un estilo saludable se mantienen en el tiempo, así como, la sostenibilidad de ellas para apreciar los beneficios de una adecuada prevención.

Recordemos que nos desenvolvemos en un ambiente que estimula al sobrepeso y obesidad, al que llamamos “obesogénico”. Esto empieza con una inadecuada percepción de peso saludable, el mayor acceso a alimentos grasos y altamente calóricos, la disponibilidad de alcohol sin control de horarios ni porciones, el estrés laboral y personal, más un sinnúmero de otros factores.

¿Es el período navideño el más demandante desde el punto de vista nutricional?

Es probable que sea el más prolongado, pero sin dudas, todos los festivos durante el año tienden a extender una invitación abierta al exceso en el consumo de alimentos y bebidas.

Si su rutina actual implica comer fuera de casa, asistir a eventos sociales relacionados a su empleo, consumir alcohol con frecuencia, incluir dulces y bebidas azucaradas diariamente, tiene el mismo escenario que replica el período navideño.

Es por ello que las recomendaciones a continuación no se limitan a este período festivo, sino que pretenden estimular a la moderación y concientizar sobre un problema que tiene como desenlace el desarrollo de enfermedades crónicas como la hipertensión arterial, diabetes mellitus, hígado graso y otras, que pueden estar acompañadas o no de sobrepeso u obesidad:

- Realice ejercicios de forma rutinaria. Mantenga la constancia en la actividad física que escoja.

- Siempre desayune, evite períodos de ayuno prolongado.

- Incluya frutas y verduras diariamente.

- Evite el cigarrillo y el alcohol, no hay una recomendación específica que se considere saludable.

- Limite frituras, dulces, bebidas azucaradas y alimentos procesados (embutidos).

Disfrute las fiestas, con la responsabilidad, conciencia y actualización que caracteriza a quien prioriza en su alimentación y en el cuidado de su salud como principal objetivo personal.

Erika Pérez Lara