¿Existe una dieta para el acné?

La relación entre la dieta y el acné es sumamente controversial, objeto de muchos estudios sin una respuesta concluyente.

Dentro de los factores nutricionales asociados están la leche y sus derivados, el chocolate, el índice o carga glicémica de la dieta, la ingesta de fibra, ácidos grasos, antioxidantes, zinc, vitamina A y yodo.

Es entendible que tomando en cuenta la cantidad de elementos que podrían influir resulte confuso atribuir un causante en específico.

¿Cuál es la actualización con respecto a cada uno de estos factores?

- Sobre la leche y productos lácteos. Lo que se atribuía a estos alimentos y la aparición de acné tenía relación con el contenido de hormonas producidas por las vacas durante el embarazo. Se propone que principalmente algo conocido como factor de crecimiento similar a la insulina 1 (abreviado IGF-1 por sus siglas en inglés). Ademas, se sugiere que la leche que conseguimos habitualmente también es rica en precursores de la dihidrotestosterona. Según algunos estudios realizados en 2005 y 2006 por un autor apellido Adebamowo y colaboradores encontraron una asociación entre lácteos, principalmente descremados o sin grasas, con la aparición de acné en mas de 6,000 jóvenes entrevistadas.

- Sobre el chocolate. Tampoco tenemos una clara asociación, los estudios que vinculan el chocolate con el acné tienen muchos fallos en la metodología de la investigación. Se asume que como el chocolate negro tiene más antioxidantes que el chocolate de leche podría tener menos efectos comedogénicos, pero esto tampoco está comprobado.

- Sobre el índice o carga de glicemia de los alimentos. Se propone que debido a la elevación en la insulina que produce consumir alimentos con un mayor impacto en la glicemia (azúcar en sangre), se podría estimular la producción de andróginos que aumentan la producción del sebo.

- Sobre la fibra en la dieta. Su efecto en reducir los niveles de glicemia podría tener relación con mejoría en la aparición de acné.

- El rol de los antioxidantes, una dieta rica en omega 3, suplementación con zinc, vitamina A están por comprobarse. Tienen una justificación orientada a la desinflamación que promueven.

Finalmente, al igual que en cualquier propuesta nutricional deberán considerarse muchos factores para realizar recomendaciones. Sugerir evitar los lácteos, chocolate, aumentar el aporte de fibra, educarles sobre el índice glicémico de los alimentos podría resultar de apoyo, tomando en cuenta las limitaciones de la evidencia científica y el hecho de que la dieta forma parte de la estrategia de tratamiento, no de la cura.

Mantengamos la información actualizada y sigamos evaluando los factores predisponentes para tomar conductas acertadas.

Erika Pérez Lara

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Dra. Erika Pérez-Lara Doctora en Medicina. Especialidad en Nutriología Clínica en INTEC. Master en Nutrición y Alimentación en Universidad de Barcelona (UB).