“Una combinación mortal”

El uso del cigarrillo y el sobrepeso son causas de morbilidad (enfermedad) y mortalidad a nivel mundial. Esto no es nueva noticia. Lo que usted probablemente no sabe, es la relación que existe entre ambos problemas. Fumar y estar en sobrepeso u obesidad aumentan el riesgo de diabetes mellitus tipo 2, hipertensión y enfermedad cardiopulmonar (Bush, 2016) pero más importante, la simultaneidad del cigarrillo con el sobrepeso aumenta más el riesgo de mortalidad que tener uno de los dos problemas de forma individual.

Algunas de las teorías que relacionan el cigarrillo con el peso corporal son:

- La nicotina aumenta el gasto energético (“acelera el metabolismo”) y reduce el apetito, lo que podría explicar el aumento de peso cuando se suspende el cigarrillo (Chiolero, 2008).

- Se ha reportado que los exfumadores tienen preferencia por los dulces al cesar el cigarrillo.

- Puede alterarse el patrón de sueño.

- Existe alteración de las papilas gustativas por las sustancias contenidas en el cigarrillo (Cheruel, 2017).

- Los fumadores tienen más ‘antojos’ o preferencias por alimentos altos en grasas y ‘comidas chatarra’ (Chao, 2017).

- Definitivamente, cuando existe relación entre el peso corporal y el cigarrillo tenemos algunos problemas:

- Pensar que puede aumentar de peso puede ser una barrera para la persona que está tratando de dejar el cigarrillo.

- Un aumento de peso considerable, podría resultar en el desarrollo de enfermedades como hipertensión o diabetes.

Actualmente, es controversial y complejo el tratamiento de un paciente en obesidad y fumador, pues tratar de cambiar ambos comportamientos al mismo tiempo no es tarea fácil.La tendencia es, tomar uno de los problemas y priorizar en su resolución, pero lo ideal es que se traten de forma conjunta integrando las disciplinas concernientes (psicología, psiquiatría, ejercicio y ajustes nutricionales).

Una futura madre, que suspende el cigarrillo por el embarazo, tendrá también mayor riesgo de aumento de peso durante la gestación, por lo que resulta esencial la inclusión de una estrategia nutricional y actividad física regular para compensar estos efectos (Harris, 2016).

Lo que debemos resaltar es, los beneficios de suspender el cigarrillo (y elementos similares como el cigarrillo electrónico) son múltiples. La prevención del cáncer, enfermedad cerebrovascular, enfermedad cardiopulmonar, abortos en el embarazo y alteración en el crecimiento del bebé son algunos de ellos. Todos estos beneficios serán más efectivos, si la suspensión del cigarrillo se realiza antes de los 30 años (West, 2017) pues la expectativa de vida es la misma que la persona que nunca ha fumado. A mayor tiempo de uso del cigarrillo, menos beneficios.

Erika Pérez Lara

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Dra. Erika Pérez-Lara Doctora en Medicina. Especialidad en Nutriología Clínica en INTEC. Master en Nutrición y Alimentación en Universidad de Barcelona (UB).