Conoce el té más bueno "de la bolita del mundo"
Tiene sabor a trópico, a juventud, alegría y el excelente beneficio de ayudarte a liberar líquidos del cuerpo, sin que sea tóxico
Mayra Pérez Castillo
Tomar té es una costumbre milenaria tan usada en oriente como en occidente; para deleitar el paladar a media tarde y para suplir necesidades curativas del cuerpo. Esta última es la razón más común en República Dominicana, donde lo habitual es hacer una infusión de hojas, raíces y especias que tienen grandes promesas de bienestar.
Sin embargo, hay otras opciones que son igualmente beneficiosas para la salud; mientras cumplen la misión de ser un guiño de exquisitez al gusto. Como el que recientemente descubrimos, el té de piña, que resalta por ser un hermoso líquido amarillo, de sabor frutal entre dulce y cítrico; que a la vez promete ayudarte con la retención de líquidos y por tanto a bajar de peso.
Se puede consumir a cualquier hora del día, fría o caliente. De ambas formas es encantadora. En caso de usarlo como bebida refrescante, te recomendamos servir con el zumo de un limón para aumentar la acidez y potenciar el efecto depurativo.
Lo mejor de todo es que se hace con los desechos: la cáscara y el "corazón", el resto de la fruta disfrútala como de costumbre.
Té de piña con jengibre y especias
Esta receta te da el contenido aproximado de un litro que lo ideal es conservarlo en un frasco de cristal bien tapado.
Ingredientes:
La cáscara y el corazón de una piña
1 cucharada de jengibre rallado (si padeces de hipertensión u otra enfermedad que no te permita consumirlo sustituye por cúrcuma. El efecto será igual).
1 astilla de canela
5 bolitas de malagueta
3 anís de estrellaMiel (opcional si quieres endulzar)
Preparación
En una olla con abundante agua agrega todos los ingredientes, tapa bien y deja hervir por 10 minutos. Retira del fuego y deja reposar por 10 minutos más tapada. Ya puedes servir con miel; aunque el sabor resalta más sin ella.
Mayra Pérez CastilloApasionada del contenido sobre la salud, la belleza, el buen vivir y la cultura.
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