El porqué del arte, según el diseñador italiano Mauro Mori
Cada persona tiene un relación diferente con el arte, pero el diseñador demuestra que a todos nos une la necesidad de expresarnos y de llegar a la esencia de las cosas
Laura Yépez
El arte es muchas cosas para muchas personas diferentes. Es simple, es complejo, es liberador, es el guardador de nuestros secretos; es lo que necesitamos que sea cuando más lo necesitamos.
Para los afortunados que llaman al arte su trabajo, se agregan niveles de complejidad: de estudio, de formación y de experiencia... pero, debajo de la superficie, permanece la esencia: el primer contacto con el arte que nos captivó y la incesante necesidad de expresarnos que nos mantiene regresando una y otra vez.
Para el diseñador italiano de art furniture, Mauro Mori, la pasión que nació viendo pintar a su hermana, hoy la expresa por medio del diseño de muebles artísticos. El contacto físico entre sus manos y las obras, y la simbología que esconde la intención que quiere representar, son elementos vitales para su día a día.
¿Cómo inició su pasión por el arte?
Mi pasión por el arte nació por mi hermana que pintaba; esa vena artística proviene de ella... Luego, fui descubriendo la grandísima posibilidad de expresión que otorga el arte, además de que es una gran plataforma de crecimiento personal.
A través de estas formas artísticas, es una terapia que incrementa la necesidad de expresar cosas que las palabras no pueden expresar. Cuando creas una obra utilizas las manos de forma casi meditativa, ya que entras en contacto con esa parte interior tan profunda, tan privada. Ese es mi acercamiento y mi interés por el arte.
¿Qué le debe de sus pasiones artísticas a sus raíces italianas?
Somos afortunados de nuestro legado cultural e histórico. Al nacer en Italia tienes la ventaja de convivir con la belleza artística, entonces creces contaminado del buen gusto, la tradición y la cultura. Toda esta tradición claramente estimula el desarrollo de tu expresión artística.
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¿Cómo incide un buen diseño en un espacio y, por consiguiente, en nuestro sentido de bienestar?
Pienso que lo vital es que exista un discurso empático entre el espacio y la gente que convive en él. Yo creo objetos de dimensiones pequeñas, medianas y grandes para diferentes proyectos, pero para todos se requiere una armonía entre los objetos y el entorno en el que se posicionarán.
Lo que intento es crear una armonía dentro del espacio. Lo difícil es crear una armonía entre la necesidad del cliente y el entorno en el que se realiza el trabajo. La empatía más importante es la que surge de la armonía entre los lugares y las personas. Tiene que haber un proceso de traducción entre la experiencia de la gente y las características del objeto y del proyecto completo.
Previamente usted ha conversado sobre el rol de los símbolos en su trabajo. ¿Por qué son tan importantes para usted?
El simbolismo y la utilización de los símbolos me permite llegar a la esencia de las cosas; utilizando unos símbolos, puedo dar la idea de la significación de la cosa que representa. Sería muy útil para quienes miran mis obras conocer el simbolismo que hay detrás de ellas porque, sobre todo con el arte tridimensional, es necesario que se conozcan los símbolos que hay detrás para poder interpretarlos. Claramente los símbolos pueden surgir de distintas fuentes: pueden llegar del arte o de una cultura o de una tendencia de moda, pero lo más importante es que a través de los símbolos pueda representar la esencia de las cosas... Los símbolos son fundamentales para arribar a la esencia.
¿Cómo se traduce la complejidad de la simbología a un lenguaje contemporáneo y personal?
Se logra con la experiencia. Es fruto de la experiencia del trabajo, de estar cerca. Cómo leer o traducir los símbolos en las obras es una cosa muy personal que surge de tu propia sensibilidad y de la manera de ser de cada persona; cada uno de estos elementos influye en la manera de interpretar y de transformar los símbolos. Cada quien tiene sus valores principales y, dependiendo de ellos, ocurre este proceso de transformación de los símbolos.
Mi trabajo se caracteriza por el uso de materiales naturales y mi filosofía se basa en la intencionalidad y la simplicidad... cosas hechas a mano. Son valores importantes que me ayudan a enfocarme.
Imagina cuando tú tienes diversas riquezas de estimulaciones: el cliente quiere una cosa, el arquitecto quiere otra, hay ‘too much information’. La forma de proceder es apelando a tus valores propios y crear una síntesis de todas estas cosas. En ese momento puedes interpretar y dar a luz a las obras.
Laura Yépez
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