Frank & Pamela, un tándem de lujo en DGT

Este formato de concurso no sería exitoso sin un buen host. Y la edición local de Dominicana’s Got Talent cuenta con dos anfitriones de lujo. Él, considerado uno de los actores más populares de la actualidad, quien además ha sido el director de la película más taquillera del cine en los últimos tiempos, Frank Perozo; y ella, Pamela Sued, maestra de ceremonias, productora, locutora y actriz, es considerada un referente de la comunicación de esta generación. Su estilo de comunicar es locuaz, cercano y elegante.

Frank, ¿cómo llega Dominicana’s Got Talent a tu vida?
Llega por la dicha de tener buenos amigos que creían y creen que yo puedo hacer esto de la televisión, y hacerlo bien, como es el caso de Nashla Bogaert, Tuto Guerrero y Gilberto Morillo, los creadores. Hace ya un tiempo se reunieron conmigo, me invitaron a cenar, me hablaron del proyecto e inmediatamente me mostraron de qué se trataba y que querían que yo fuese quien lo presentara brinqué de alegría. Yo les dije: “quiero formar parte de eso, aunque no sea presentador de televisión, animador, ni nada de eso, yo me atrevo, y aquí estoy. Aunque he presentado otros proyectos, la televisión no es un lugar donde yo me siento 100% en control, como en un set de cine o en un teatro, pero de verdad que con el equipo que tengo, con los ensayos y con el expertise de los demás, todo ha sido maravilloso.

Han sido unas jornadas extenuantes de grabaciones, donde el horario se extendía hasta la madrugada, ¿cómo has llevado este proceso?
Cuando uno está trabajando no importa, tú sabes que cuando haces arte, este no tiene tiempo. Lo importante es llevar el producto lo más terminado que podamos sin importar el tiempo que lleve; como se dice en el teatro el show tiene que continuar, pase lo que pase. Hemos tenido jornadas de grabaciones de hasta 18 horas corridas, y en el caso de los productores se extiende a 22. Pensábamos que este proyecto iba a ser grande, pero no tan demandante; la verdad es que todo lo que cuesta trabajo vale la pena.

¿Cómo ha sido la química entre ustedes?
Una locura. Es que somos amigos todos. Muchas de estas personas me dieron mis primeras oportunidades, me ayudaron en mi carrera, como es el caso de Milagros, que trabajamos juntos. Otros que admiro como Raymond y Waddys, que me ayudó mucho cuando yo estaba estudiando en Nueva York en mis inicios, o Nashla que es una hermana, es un pedazo de mi corazón y de mi vida, al igual que Pamela, los productores y todo el personal técnico. La química se siente en la pantalla.

¿Cómo defines a los jueces?
Todos los jueces hacen una muy buena evaluación. El conjunto está diseñado de una forma muy calculada porque las cualidades de los cuatro, a fin de cuentas arman y te explican al artista. Yo creo que cada uno de ellos tiene un rol muy especial y determinado.

A parte de presentar el show, como host eres el encargado de tranquilizar al concursante.
Yo no estoy ahí para evaluarlos, yo estoy para apoyarlos, para motivarlos, para hacerlos sentir cómodos y seguros antes de cada audición, darles el ánimo que necesitan y servirles de pañuelo de lágrimas si lo necesitan o en caso de que no pasen.

¿Te has emocionado con algunas de las historias?
Me he emocionado con varias historias. Y me he sorprendido con cada una. El equipo de producción se ha asegurado de que lo que pusiéramos aquí sea impactante, y me he quedado con la boca abierta. De verdad República Dominicana sí tiene talento, y me han conmovido muchas de las historias, me he emocionado bastante. He llorado, he reído, ha sido una mezcla de emociones.

¿Cómo motivarlos para que no se sientan frustrados cuando les dan un no?
La carrera de un artista es una carrera de rechazos y es una carrera de muchos ‘no’. Y es importante hacerles saber que eso es parte de la vida y no todo es color de rosa, que hay que esforzarse, tener disciplina, y saber que hay que dar más muchas veces. Los nervios traicionan en ocasiones, pero hay que hacerlos entender que, si les dan un ‘no’, no es con la intención de troncharles el camino.

¿En tu caso, has recibido muchos “no” en tu carrera?
Mi carrera ha sido de rechazos, aunque la gente no lo crea, ahora ven mi carrera y dicen que es exitosa, pero fueron muchos los ‘no’ que recibí, sin embargo, entiendo que esos no fueron los que le dieron fortaleza a la seriedad con la que trabajo.

¿Y cómo pudiste transformar esos ‘no’ en sí?
Transformando todas esas energías negativas en positivas. Ese es uno de los códigos más importantes que puede tener un artista. Eso es propio de la naturaleza de un artista, por ejemplo, en la comedia, se trata de hacer algo gracioso de lo dramático o trágico. No hay drama sin comedia y viceversa. La vida artística se trata de eso, muchos ‘no’ y pocos sí.

¿Cómo director no has visto un talento en el reality que piensas adaptar para uno de tus proyectos cinematográficos?
Sí, sí, Raymond y nos picamos los ojos cuando vemos un talento que nos sorprende. Hemos visto a mucha gente que tiene potencial en República Dominicana.

¿Crees que este tipo de proyectos (franquicias extranjeras y de temporada) apuntan a un antes y un después en la televisión dominicana?
Yo creo que sí, a mí no me gusta decir eso porque todo marca una pauta, sin importar la calidad del proyecto o el producto, porque es parte de nuestra historia televisiva, pero sí me atrevo a decir que estoy sorprendido con la calidad de talento que he visto en República Dominicana y con los valores de producción con los que estamos trabajando. El productor de la versión británica vino al país a asesorarnos y cuando regresó a su país nos dijo que estaba más que satisfecho y sorprendido con la calidad de la versión dominicana.

¿Piensas que es el futuro de nuestra televisión?
No sé si es el futuro, pero entiendo que es una carta que hay que jugar más seguida, porque los realities y los programas de televisión siempre han funcionado, aunque se compite con los enlatados, es la tendencia internacional.

Este es tu retorno a la televisión, después de exitosos proyectos como Ciudad Nueva, ¿qué ha significado este reencuentro con el medio en el que empezaste?
El arte en general es demandante. Hacer cine o televisión requiere de mucho tiempo, mucha coordinación, pero más que todo es la entereza de cada persona y la pasión que le ponga a cada proyecto que esté haciendo. Al final de cuentas yo soy actor, a mí me gusta comunicar y la televisión comunica. Es una cuestión de emisor y receptor. Me siento en mis aguas, aunque la haya parado un tiempo, siento que nunca me he ido. Soy un gran consumidor de la televisión, la consumo muchísimo, y soy un amante de lo que está pasando. Me da pena cómo está en la República Dominicana, pero sí entiendo que lo que está haciendo este equipo es elevar un poquito el nivel de eso que me dio mis inicios a mí.

¿Consideras prioritaria la ley de mecenazgo para impulsar más proyectos televisivos y culturales importantes?
Definitivamente, para mí es un paso muy importante que se está dando. Esta ley es más que necesaria. Ayudaría enormemente, y creo que existirían muchas más variantes y más variedad en la televisión dominicana.

Vienes con la secuela de Qué León, denominada Los Leones, háblanos de este proyecto que en poco tiempo estará en las salas de cine
Es un proyecto maravilloso, la primera parte me sorprendió. Uno trabaja para el público, uno no trabaja para llenar los cines, no trabaja para los números, sino para que cada persona que tenga la oportunidad de sentarse a ver el filme se disfrute la cinta y el mensaje. Cuando yo vi el resultado final y la aceptación del público brinqué de la emoción, no solo porque se estaba disfrutando en el mercado dominicano sino porque estaba siendo apoyada a nivel internacional, donde se le abrieron las puertas. Eso me hizo sentir muy orgulloso como dominicano, porque ya nuestro cine estaba siendo exportado.

Finalmente, ¿cómo crees que aceptará el público el programa Dominicana’s Got Talent cuando salga al aire?
El público que se sienta en la sala es el mejor termómetro para saber qué es lo que va a pasar en la audiencia también en su casa. Y yo entiendo que, si no tenemos ahora mismo el proyecto de televisión más importante de los últimos años, será el proyecto más importante de la República Dominicana.


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Pamela, ¿cómo llega este proyecto a tu vida?
Yo soy súper fan de todas las versiones de Got Talent que se han hecho en todos los países, principalmente el de Norteamérica, siempre me ha gustado y lo he seguido. Cuando me enteré que estaba el proyecto en República Dominicana estuve siempre muy empapada por mi amistad y cercanía con Tuto, al mismo tiempo que estaba haciendo otros proyectos con Nashla, y siempre me mantuve muy al tanto. En el proceso Tuto un día me llamó para decirme que quería que formara parte de él, y yo sin pensar le dije ahí estaré. Estoy en mi rol de host junto con Frank, y la verdad es que estoy súper feliz. Ha sido maravillosa no sólo la experiencia laboral, sino ver todo el engranaje, el equipo que hay detrás de este proyecto, y descubrir que en República Dominicana tenemos la capacidad de hacer algo de esta magnitud, y que sea gente joven que conozco ha sido maravilloso.

¿Cómo ha sido la química durante las grabaciones?
Maravillosa. Yo había tenido la oportunidad de trabajar anteriormente con todos, excepto con Raymond, aunque sí lo había entrevistado; ha sido chulísimo. Es agotador porque han sido muchas horas de trabajo, pero, sin embargo, lo que lo hace ligero, llevadero, entretenido ha sido eso, que vienen todos con la mejor de las intenciones para hacer este trabajo.

Como host tienes una responsabilidad muy delicada hasta cierto punto, que es enfriar, motivar y hasta consolar a los concursantes, ¿cómo asumes ese rol tan complicado?
Bueno, nos drena bastante porque nos divertimos muchísimo con los actos que pasan, pero si no lo hacen, obviamente, somos el paño de lágrimas, el hombro, las manos, el abrazo que encuentra ese participante que no logra pasar a la siguiente ronda. No es nada fácil ver cómo llegan los participantes con sus sueños, sus ilusiones, pero obviamente es una competencia. Yo diría que así como disfrutamos con cada participante, también tenemos aprendizajes. Aprendemos de su actitud, de sus historias, hay algunas desgarradoras, pero al mismo tiempo inspiradoras, y ha sido todo como una montaña rusa de emociones, pero al mismo tiempo de mucho aprendizaje.

¿Te has sentido particularmente emocionada con alguna historia en particular?
Claro que sí, de llorar con jipío. Hemos visto jóvenes que llegan de Puerto Plata, de Nagua, con talentos, sueños, y verlos con pocos recursos, con sus limitaciones, hacer cosas maravillosas en el escenario, te rebosa el alma de emoción. Yo he llorado muchísimo.

¿Cómo defines los roles de los jueces?
Cada juez es muy particular al momento de evaluar. Raymond es al que todos le gustan. Si fuera por Raymond todos pasaran, hay que recordarle que sólo 60 actos pasan al corte de jueces. Waddys es el crítico. Es una persona con tanto conocimiento en todas las áreas, pero es una persona muy directa, muy franca, sin rallar obviamente en lo personal o hacer sentir mal a nadie. Milagros es como es, súper chula, pero con un criterio muy bien elaborado al momento de emitir una opinión. Y Nashla también por igual, súper acertada en sus observaciones, al momento de emitir su opinión lo hace con mucho criterio común. Todos me han sorprendido, los cuatro tienen muy buen balance, y tratan de ser lo más justos posible en cada valoración.

¿Crees que este tipo de proyectos (de temporada y realities) son el parámetro de la televisión local?
Este proyecto creo que le va a poner la vara muy alta a los programas de temporada, pero ojalá surjan otros proyectos de esta envergadura. Se han hecho cosas tan grandes y ambiciosas como esta, hay otros proyectos en el aire o en proceso actualmente, pero el nivel de calidad de este en particular me ha impresionado muchísimo.

¿Consideras que la ley de mecenazgo puede ayudar a impulsar proyectos como este?
Es a lo que yo aspiro porque yo también tengo mi propio proyecto de televisión, y poder tener los recursos para hacerlo con la calidad es a lo que uno aspira, y que aprendió y trata de dar. Ojalá que sí, que así como el cine encontró su ley que lo ha activado, así mismo la televisión encuentre una ley que la ampare y le permita seguir haciendo proyectos de calidad, que son de alta inversión, pero obviamente son muy difíciles de costear, y una ley nos ayudaría.

Hablando de Pamela Todo un Show, ¿cómo lo definirías?
Pamela Todo un Show es mi esencia, es un proyecto en el que llego al estudio y, en el mismo tiempo que inicio a grabar, se me olvida que estoy haciendo un programa de televisión. Es un espacio donde me divierto, y donde mis invitados se divierten, por ende, el público se divierte por igual. Se creó con ese objetivo, que fuera un desahogo. Es puro entretenimiento, es pura diversión, y es el tipo de televisión que a mí me gusta hacer.

También vienes con otros proyectos.
Así es, en los próximos meses sale Malcriados, una película en la que actúo y que hicimos hace casi dos años, dirigida por Giancarlo Beras y producido por Alfonso Rodríguez. Es una película familiar que habla de los valores. También en la parte de producción estamos trabajando en la película sobre la vida de Freddy Beras Goico, que ya está en su fase de terminación y ensamble.

Retomando Dominicana’s Got Talent, ¿qué puede esperar el público cuando este proyecto salga al aire?
Yo estoy segura de que va a marcar un antes y un después en la televisión dominicana. Además, vamos a sentir que se nos va a inflar el pecho del orgullo de pertenecer a una tierra donde nace y existe tanto talento. A mí en particular lo que más emociona es saber que hay tanta juventud que se ha enfocado en prepararse, y yo siento que será maravilloso, tanto para el público, para nosotros como talento y hasta como país, nos va a ayudar un poco a nivelar la carga de los problemas que tenemos como nación, este proyecto será como un oasis.

Un mensaje a las personas que han perdido las esperanzas y creen que las oportunidades no existen.
Que sí, que las oportunidades existen cuando hay pasión, cuando hay entrega. Que se atrevan a soñar, a lanzarse, a hacer sus sueños realidad, que uno nunca sabe cuándo será el momento, pero hay que estar preparados para cuando llegue y aprovechar esa oportunidad.

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Fotos: Luiggi José Chávez Otañez
Estilismo: @readingp
Maquillaje y peinado: @kilciamedina
Vestuario: Pamela viste de Alterego con aretes de Pink Rose y anillos de Gold Center

Jeury Frías

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Periodista dominicano con experiencia en medios escritos impresos y digitales. Formado en el área de marketing digital y periodismo digital. También cuenta con experiencia en televisión.