Jorge Benavides: “Ten una intensa vida textual, lee”
El premiado escritor peruano confiesa a Estilos sus secretos literarios
Clidia Díaz
Nuestro invitado del mes, el escritor peruano Jorge Eduardo Benavides, nació en Arequipa en 1964. A finales de los ochenta partió rumbo a España dispuesto a organizar toda su vida en torno al hecho de escribir dejando atrás su profesión de Derecho. Actualmente es uno de los escritores peruanos con mayor prestigio. Su trabajo es sinónimo de máxima calidad. Sus cuentos “Los años inútiles”, “La noche de Morgana”, así como sus novelas “El año que rompí contigo”, “Un millón de soles”, “La paz de los vencidos”, “Un asunto sentimental”, “El enigma del convento”, “El asesinato de Laura Olivo” y “El collar de los Balbases” reflejan el ambiente de los difíciles años de fines de los años 80 en Lima e incursiona en asuntos fantásticos que denotan la pluma de Julio Cortázar. Además de sus novelas y cuentos ha publicado también el libro “Consignas para escritores”, testimonio de sus más de veinte años de experiencia como profesor de talleres literarios impartidos por todo el mundo (Lima, Madrid, Granada, A Coruña, Chicago, Miami, Boston, Ginebra, Viena, Pekín, Shangai). Gracias a sus enseñanzas muchos de sus alumnos han conseguido diversos premios literarios. Actualmente colabora con diversos medios informativos y culturales como El País, Cuadernos Hispanoamericanos y la revista Mercurio.
Describe en pocas palabras tu encuentro con el libro.
Supongo que siempre he sido lector porque en casa se leía y para mí resultaba natural tener un libro. Desde las primeras novelas de aventuras hasta otros que se van volviendo más complejos, mi relación con los libros siempre ha sido constante.
¿Cuál es tu personaje literario preferido?
Hay muchos, de distintas lecturas que a su vez corresponden a distintas épocas. Pero quizá el personaje epigonal de todos ellos sea el Quijote, con su pasión por la aventura, su pundonor y su libérrima humanidad. Un personaje potente como pocos.
¿Qué libro regalarías a ciegas?
“Un mundo feliz”, de Huxley.
Menciona tres escritores que hayan ejercido fuerte influencia sobre ti.
El chileno Jorge Edwards, el peruano Mario Vargas Llosa y el francés Marcel Proust. Los tres son escritores de una alta calidad técnica y una ambición literaria muy poderosa y particular.
Cuando escribes, ¿tú decides el tema o este te elije a ti?
El proceso creativo, al menos en mi caso, pasa por rescatar una idea a menudo brumosa sobre un tema o una situación determinada y persistente que poco a poco toma forma y que en muchas ocasiones guarda escaso parecido con el tema original. Casi nunca uno elige el tema, sino que lo descubre.
¿Cuáles son los géneros que sobresalen en el conjunto de los libros que posees?
Soy un lector de múltiples géneros y apetencias. Leo novela y narrativa en general, pero también mucho ensayo político, biografías e historia, sobre todo la relacionada con el mundo clásico. Procuro estar al día también en determinadas áreas de las ciencias.
Si una tormenta tomara por asalto tu biblioteca y solo pudieras rescatar cinco obras, ¿cuáles serían estas?
“En busca del tiempo perdido”, de Marcel Proust, “Guerra y paz”, de Lev Tolstoi, “El mundo de ayer”, de Stefan Zweig, cualquier novela de Galdós y “El Quijote”. Se quedan muchas más, naturalmente.
¿Qué libro de los que habitan en ella te hubiese gustado escribir?
Hay muchas, naturalmente, pero si tuviera que elegir alguna sería “Ana Karenina”. Es una novela maravillosa, llena de ambición narrativa, y que nos muestra los más recónditos espacios del alma humana.
Borges expresó: “La lectura es una de las formas de la felicidad y no se puede obligar a nadie a ser feliz”. ¿Crees que esa felicidad se puede contagiar?
Sin lugar a dudas, la felicidad es un estado emocional a menudo efímero y efervescente que fácilmente puede contagiarse. Ahora bien, el gusto y el placer por algo como la lectura se puede inocular en otro, pero cada quien vivirá esa felicidad a su manera.
¿Qué libro amaneció contigo hoy?
“La mala espera”, del escritor argentino Marcelo Luján. Una novela no muy larga pero contada con calidad y eficacia.
¿Si fueses un libro, como te llamarías?
“ El final de la novela”.
¿Qué eslogan propondrías para una campana nacional de lectura?
“Ten una intensa vida textual: lee”.
Clidia DíazAbogada, amante de la buena literatura y de la lectura compartida. Promotora de grupos de lectura y viajes literarios, articulista y autora de la sección Confesiones de Lector en Diario Libre.
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