¡No más caos! Así puedes lograr una despensa en orden
Si al abrir tu despensa estás ante una imagen que podría causarle un ataque al corazón a la mismísima Marie Kondo, presta atención a estos trucos que lista la organizadora profesional Rossy Montás
Laura Ortiz Güichardo
A simple vista tu cocina luce impecable, siempre limpia y con todo en su lugar; sin embargo, cuando toca abrir la despensa, ¡oh, sorpresa!, estás ante una imagen que podría causarle un ataque al corazón a la mismísima Marie Kondo.
Claro, sabemos que tener esa área de la casa en orden no es tan sencillo, por todo lo que se guarda y rebusca a diario en ella (además, siempre está la excusa de que se trata de un desastre a puertas cerradas, que nadie verá), pero ¿sabes qué?, ya es hora de plantearte como meta tener una despensa organizada, para así ahorrar tiempo, dinero y espacio.
La arquitecta y organizadora profesional Rossy Montás, creadora de @organizar_up, te da los truquitos para lograrlo:
1. Trata de solo colocar artículos que estén relacionados con alimentos. Aunque parezco un consejo obvio, hay quienes utilizan el espacio para almacenar cosas que ni siquiera se relacionan con la cocina. ¡Grave error!
2. Para evitar el ruido visual y crear uniformidad, considera los productos que se pueden sacar de su empaque original y almacénalos en envases transparentes con sellos herméticos. Esto garantizará su frescura, además de que te permite saber cuánto queda en el recipiente para reponer. La experta recomienda los de vidrio por sus cualidades: no contamina lo que se conserva, son reciclables en su totalidad, no se manchan y son fáciles de limpiar.
3. Etiqueta para que sea más fácil identificar, sobre todo si hay más personas en la casa. “Si los productos son parecidos puede haber confusiones con los envases, por ejemplo, confundir azúcar con sal o fécula de maíz con harina”, explica Montás.
4. Ten en cuenta la fecha de vencimiento de los productos. Puedes colocar en la parte inferior una etiqueta con la fecha que fue agregado al envase o la fecha de vencimiento del producto, ya que a muchos empaques se les tiende a borrar la fecha de caducidad con el tiempo.
5. Distribuye bien el espacio con organizadores, cajas o cestas para agrupar por tipo de alimentos o categorías.
6. Coloca los productos que más usas en los estantes centrales o de más fácil acceso. Si es un armario, ubica los productos de uso frecuente a la altura de los ojos, en los estantes altos coloca los menos pesados, los de uso ocasional o de menor uso, mientras que en la parte baja puedes situar lo más pesado, botellas, cajas o productos de reposición.
Ya has organizado tu despensa, viene la parte más difícil y en la que la mayoría fracasa: mantener el orden en el tiempo. Pero descuida, la experta también comparte algunas recomendaciones para que eso no sea un problema:
1. Lleva un inventario de los productos disponibles en la despensa para evitar la compra innecesaria. Si la despensa es pequeña, de cada producto ten un paquete abierto y otro por abrir. Cuando se abra el paquete de reserva, recuerda reponer. Ten pocas cantidades de los productos de menor consumo.
2. Protege los tramos de las manchas y derrames con material antideslizante que se pueda limpiar una vez por semana.
3. Ubica una lista de compras en la zona de la despensa, así podrás ir marcando lo que debes reponer y hacer más eficiente la compra, solo comprando lo necesario.
4. Los productos deben estar en un lugar definido, que sea cómodo y accesible para todos.
5. La organización de una zona no debe ser una camisa de fuerza. Procura reorganizarla lo antes posible si alguna circunstancia lo demanda.
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Fotos: Pinterest
Laura Ortiz GüichardoPeriodista de Revista. Me apasiona escribir sobre salud mental y relaciones de pareja. De no ser periodista, sería psicóloga con un blog.
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